¿China destronará a Estados Unidos como la mayor economía del mundo?
El orden global liderado por Estados Unidos ha acabado y China se encuentra tallando una economía que podría convertirla en la principal potencia a nivel mundial.
En un discurso pronunciado en la Cumbre G-Zero 2019 realizada en Tokio, Ian Bremmer, columnista de asuntos exteriores y editor en general en la revista Time, habló sobre cómo es que China está haciendo méritos para posicionarse como la principal economía a nivel mundial, desplazando al dominio de Estados Unidos, que, según el experto, ha acabado.
Según Bremmer, ya no hay un mercado libre global puesto que el país asiático pronto será la economía más grande del mundo, debido a que practica el capitalismo de estado, un sistema que permite a los funcionarios del gobierno garantizar que el crecimiento económico sirva en última instancia a los intereses políticos y nacionales.
“El sistema capitalista estatal de China distorsiona el funcionamiento tradicional de una economía impulsada por el mercado al depender en gran medida de las empresas estatales y los campeones nacionales respaldados por el estado para garantizar la estabilidad económica y, por lo tanto, política”, expresa.
En referencia a la guerra comercial, el especialista explica que los aranceles estadounidenses y chinos dominan las noticias, pero la historia más importante es la expansión de los mercados mundiales de productos básicos.
“El mercado de bienes y servicios, por otro lado, será menos global”, sostiene, porque la mano de obra en la producción se está reduciendo drásticamente a medida que las nuevas tecnologías llevan la automatización y el aprendizaje automático al lugar de trabajo.
En relación a ello, comentó que los fabricantes quieren producir en lugares menos costosos y por eso buscan mano de obra barata, apoyados en el auge de las clases medias en China, India, el sudeste de Asia, América Latina y el África subsahariana.
En relación al el mercado global de datos e información, indicó que se está rompiendo en dos, porque tanto China y Estados Unidos están construyendo dos ecosistemas en línea distintos.
Bremmer argumenta que el sistema estadounidense está construido por el sector privado y (libremente) regulado por el gobierno, mientras que el chino está dominado por el estado. “La existencia de dos sistemas competitivos limita las oportunidades comerciales”, apunta.
América y China
De igual modo, el experto manifiesta que el mundo necesita que China permanezca estable, productiva y cada vez más próspera para impulsar el crecimiento global.
“Necesitamos que China desempeñe un papel internacional constructivo, aunque solo sea limitado. Trabajar con otros gobiernos para enfrentar los desafíos planteados por la pobreza, los conflictos, los riesgos para la salud pública, la falta de educación, la falta de infraestructura, el cambio climático y el avance de las nuevas tecnologías disruptivas. Y, por supuesto, también necesitamos estas cosas de los Estados Unidos”, concluye.
FUENTE: Revista Time