Ciencia

La OMS afirma que la viruela del mono “no es el nuevo COVID” y sabe “cómo luchar” contra el virus

A pesar de que el clado I del mpox se considera más peligroso que el clado II, los expertos están investigando si hay diferencias significativas entre el clado Ia y el clado Ib en términos de gravedad.

La OMS está monitoreando la situación de cerca para comprender mejor la transmisión y el impacto de esta enfermedad. Foto: composición de Jazmin Ceras LR/CDC/Freepik
La OMS está monitoreando la situación de cerca para comprender mejor la transmisión y el impacto de esta enfermedad. Foto: composición de Jazmin Ceras LR/CDC/Freepik

El mundo sabe "ya mucho" sobre la antes conocida como viruela del mono, así que no se le puede considerar “el nuevo COVID”, afirmó este martes 20 de agosto el director para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Hans Kluge.

"El mpox no es el nuevo COVID. Ya se trate del clado I del mpox, que originó la epidemia actual en África central y oriental, o del clado II del mpox, que originó la epidemia de 2022" en el mundo, declaró Kluge en una rueda de prensa de las agencias de la ONU. "Ya sabemos mucho sobre el clado II. Aún nos queda por aprender del clado I", afirmó y recalcó que "sabemos cómo luchar contra el mpox", antiguamente conocido como "viruela del mono".

Emergencia sanitaria por aumento de casos de mpox

Ante el aumento de casos de mpox en República Democrática del Congo, a causa del subtipo clado Ib, que también afecta a Burundi, Kenia, Ruanda y Uganda, la OMS decidió decretar una emergencia sanitaria pública internacional el 14 de agosto, el máximo nivel de alerta.

La OMS ya tomó una decisión así en 2022, cuando una epidemia de mpox, provocada entonces por el subtipo clado IIB, se extendió por el mundo. La alerta fue levantada en mayo de 2023.

El virus fue descubierto en 1958 en Dinamarca, en monos criados para la investigación. En 1970, se detectó por primera vez en un humano, en la actual República Democrática del Congo (ex-Zaire), con la idifusión de un subitpo clado I, que se contagiaba generalmente por contacto con animales.

Según Catherine Smallwood, de la oficina europea de la OMS, de momento no se detectó ninguna transmisión de animal a humano del clado Ib. "Parece tratarse de una cepa del virus que circula exclusivamente dentro de la población humano" y "es probable que se transmita más eficazmente entre humanos".

"Sabemos que el clado I es más peligroso que el clado II", agregó un portavoz de la OMS en Ginebra, Tarik Jasarevic, pero los especialistas están tratando de averiguar si existe una diferencia real entre el clado Ia y el clado Ib, en términos de gravedad.