Ciencia

Biólogos logran que una ratona tenga crías sin necesidad de un macho ni esperma

Este sería el primer mamífero que se reproduce asexualmente gracias a la edición genética. Según los autores, los resultados podrían replicarse en otras especies en el futuro.

De todas las crías que sobrevivieron durante el alumbramiento, solo una vivió hasta ser adulta e incluso tuvo descendencia. Foto: Yanchang Wei
De todas las crías que sobrevivieron durante el alumbramiento, solo una vivió hasta ser adulta e incluso tuvo descendencia. Foto: Yanchang Wei

Un ratón hembra ha logrado tener crías a partir de un óvulo no fecundado que fue editado genéticamente por biólogos chinos. La proeza científica se trataría del primer caso donde se logra forzar la partenogénesis en un mamífero, un fenómeno también conocido como ‘nacimiento virgen’.

La partenogénesis es una forma de reproducción asexual donde los embriones surgen de óvulos que no han sido fertilizados por ningún animal macho. Por lo tanto, los descendientes solo comparten genes con sus madres.

El caso ha sido descrito en un artículo de la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, cuyo autor principal es Yanchang Wei, investigador de medicina reproductiva en el Hospital Ren Ji de Shanghái.

¿Qué es la partenogénesis?

A diferencia de la reproducción sexual, donde el óvulo y el espermatozoide dotan la mitad de su información genética para engendrar un ser vivo; en la partenogénesis, los óvulos hallan mecanismos de reemplazar los genes proporcionados por el espermatozoide.

La partenogénesis es frecuente en plantas, peces, reptiles y aves, pero nunca se ha observado de modo natural en vertebrados complejos como los mamíferos.

Esperma de ratones no sufre daños de radiación espacial

El estudio fue realizado por la científicos de la Universidad de Yamanshi, en Japón. Foto: AFP

El motivo se debe a que, durante la fecundación de los mamíferos, ocurre un proceso fundamental para el desarrollo normal del embrión llamado impronta genómica. Este proceso a veces hace que un gen funcione de forma diferente según haya sido heredado de la madre o del padre.

En ese caso, cuando solo hay un progenitor, los genes no se expresan correctamente, ocasionando enfermedades o haciendo que su descendencia no sea viable.

Sin embargo, con este experimento, los científicos han logrado imitar el proceso de la impronta genómica en la fecundación de los roedores.

¿Cómo se logró el ‘parto virgen’ en una ratona?

Los genetistas extrajeron óvulos de ratones hembra y, a modo similar que la impronta genómica, editaron siete puntos del genoma donde había dos copias de cada gen (masculino y femenino).

Dicha intervención inició un proceso similar a la fecundación y fueron implantados en el útero de la hembra, donde luego se convirtieron en un feto.

El procedimiento se realizó en 192 roedores hembras, pero solo una dio a luz a un ratón sano, aunque de un peso menor al habitual. Esta cría vivió hasta ser adulta e incluso tuvo descendencia.

En 2004, un equipo de genetistas había conseguido que un ratón, nombrado Kaguya, diera crías sin sexo ni esperma de por medio. No obstante, el método fue distinto, ya que usaron dos óvulos: uno real y otro alterado genéticamente para que imite la aportación genética del espermatozoide. Es decir, la cría compartió genes de dos madres distintas.

Según los autores, los resultados del experimento demuestran que la partenogénesis es factible en los mamíferos, pero para escalar su aplicación en otras especies debe profundizarse en el trabajo.