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Se reencuentra con su hija tras 5 años, pero no la reconoce y cree que es una visita

La mujer entró a su casa y, cuando vio a la muchacha, pensó que era amiga de su otro hijo y la saludó como a una extraña. Segundos después reaccionó y protagonizaron un emotivo momento que se hizo viral en Facebook.

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La emotiva escena se hizo viral en las redes sociales. Foto: captura de TikTok

A través de las redes sociales, miles de usuarios son testigos de todo tipo de hechos. En esta ocasión, se trata de un emotivo momento, el cual fue protagonizado por una familia, la cual se pudo reencontrar después de mucho tiempo. Pese a un pequeño impasse, todos disfrutaron de un agradable episodio que ya se ha vuelto viral en Facebook.

Tomi Montero, el autor de este video, recibió a su hermana luego de vivir cinco años fuera de su país. Ambos prepararon una sorpresa para su madre. Cuando la mujer entró a su casa, su hijo le hizo saber que tenían una visita.

La señora comenzó a bromar y acudió a saludar a la ‘invitada’. Se acercó a darle un beso y, en todo ese trayecto, no supo reconocer que se trataba de su hija. Segundos después reaccionó y comenzó a dar varios gritos de emoción.

Abrazó a su hija, soltó varias lágrimas y todo quedó registrado en un emotivo video que ha conmovido a miles. “No se daba cuenta de que era su hija”, “Me mata cómo la saluda sin darse cuenta de nada”, “Te amo, mamá que desconoce a su propia hija”, fueron algunos comentarios que dejaron los usuarios.

Anciana que escapó de Ucrania se reencuentra con su perrita y tienen emotivo abrazo

Un amor para siempre. Los conflictos entre Rusia y Ucrania continúan afectando a miles de personas que huyen en busca de un lugar seguro al lado de sus seres queridos. Tal como lo hizo una anciana de 86 años, identificada con el nombre de Violetta; sin embargo, se vio obligada a separarse de su amada mascota por varias semanas. Afortunadamente, recibió una tierna sorpresa que se volvió tendencia en YouTube.

En su intento por salir sana y salva, recorrió diversos países para llegar a una vivienda otorgada por una organización benéfica. A consecuencia de los constantes viajes, ella no pudo más y dejó a su perrita bautizada como Tasha en Rumania.