La actriz que asume el papel de madre del carismático protagonista de 'Asu mare' comparte detalles de su trabajo en la cinta y de su vida dedicada a la actuación. “La diferencia es abismal, ahora no hay quien no me reconozca”.Versátil,Estefany Barrientos F. Antes de Asu mare y de los comerciales de televisión, Ana Cecilia Natteri ya era la conocida actriz de teatro que destacaba en drama y en comedia. Pasaba de los ensayos a la administración de su tienda de artesanías en Miraflores y alguien la vio “precisa” para el personaje. “Nunca pregunté ¡¿por qué yo?! (Ríe). Quizá fue por mi papel en (la película) El acuarelista. No hice casting, me llamaron y grabamos un teaser”. Para muchos, el protagonismo de su personaje se ha hecho extrañar en Asu mare 2. ¿Sí, no? Pero eso depende del público, no puedo opinar nada al respecto porque no sé cómo se siente. Yo sabía que mis escenas no eran muchas y algunas no están –son pocas, una o dos– porque ya la historia iba por otro lado. La idea es que la película guste. Lo decía porque en la primera parte estaba marcada la relación madre-hijo y ahora solo pasa por algunas escenas. No creo que la mamá esté dejada de lado, porque le da algunos consejos, se preocupa por él, porque sea correspondido. ¡Imagínate! A los chicos enamorados no les ves ni la estampa, ¡ni la estampa! (Ríe). ‘Doña Chabelita’ se inspira en la mamá de Carlos Alcántara. ¿Hay algo de su cosecha? Sí, sí, hay de mí. No tengo precisamente el estilo de lo que Carlos cuenta de su mamá, no tengo esa parte criolla tan bonita que tiene la señora. ¿Las lisuras no son suyas? (Sonríe). Las tengo para mí, no se las digo a nadie, en mi casa no se decían lisuras. Pero sí, soy una mujer de carácter, no soy suavecita. Fui construyendo el personaje a partir de lo que él contaba, viendo sus shows y a partir de mí misma. A la señora la conocí después del estreno de la primera película. Los seguidores de la cinta resaltan que se identificaron con ese prototipo de mamá peruana. Sí... Yo creo que la madre peruana es heroica. Madres que pasan por tantas dificultades, en la mayoría de casos el padre es una figura ausente, y si está, está a medias, pero siempre es ella la que toma las riendas. Y es lo que pasó con la mamá de Carlos, ella crió sola a sus tres hijos y trabajaba todo el día. Antes de irse a trabajar iba al mercado, dejaba todo cocinado, y después llegaba a limpiar, a lavar. Como la mayoría de madres en este país. ¿Y usted qué tipo de mamá es? No he sido una madre muy suave, ¡te digo ah! (Sonríe). He estado sumamente pendiente de mis hijos. Mi marido estaba cerca, pero a veces no, porque trabajaba y estaba fuera todo el día. Como todas las madres, he tenido que suplir al padre, ser amiga, estar presente. Dejó la actuación un tiempo, ¿no? Sí, siete u ocho años, cuando nacieron mis hijos. Pero actúo desde el 70, ¡ya son más o menos 40 años! Mis hijos se divierten, aunque no me hacen una crítica frontal. Creo que son cautos (risas). Para una actriz que se ha desarrollado más en el teatro, ¿la fama o popularidad es como un reconocimiento? No sé si un reconocimiento pero sí es lindo ver el resultado y que a la gente le guste, que me digan: “Me encanta tu personaje”. La diferencia es abismal, ahora no hay quien no me reconozca (ríe). Me pasó en el aeropuerto, con el señor de limpieza, con el de migración, todos vieron Asu mare, y lo bonito es que se acercan con cariño. Es gratificante. ¿Hay un tipo de personaje que quiera hacer en el cine? ¡El que quieran! Pero no me gustaría que me encasillen, a los actores nos gusta cambiar. 'Asu mare' es taquillera, pero también ha recibido duras críticas. Ah claro, Ricardo (Maldonado) no pretende ser un Martin Scorsese. Es una película sencilla, no es pretenciosa. Cumple, está bien hecha. Vuelve al teatro con Fausto. ¿Qué le parece el panorama, con más salas y festivales? Se están haciendo mejores producciones en todos los teatros. No sé si el señor (Luis) Castañeda continúe el FAEL, sería un error que no lo hiciera. ¡Las salas estaban llenas! ¿Hacen falta más obras como Esperando a Godot (sobre la espera de un salvador)? Es una gran obra. Ahora la televisión no es lo mejor que hay, el nivel es mínimo, es una pena. Así que sí, falta hacer que la gente vaya a ver textos maravillosos. Alberto Ísola y yo hemos perseguido a Edgar Saba, le hemos implorado para que reponga Esperando a Godot, la gente joven merece verla. Es una de las obras inolvidables para mí.