Nuevo perfil no la considera bipolar, hecho que la haría inimputable, como se dijo en anterior audiencia. Contradicción.,Gabriel Mazzei. Con tendencia a la mentira, agresiva, histriónica y sin muestras de arrepentimiento ante las consecuencias de un mal acto que pueda cometer son algunos rasgos de Elizabeth Espino Vásquez, acusada de parricidio. Estas características fueron descritas ayer por Jeny Jilca Guzmán y Rosario Quiroz Sánchez, psicólogas del Ministerio Público que realizaron el perfil psicológico de la procesada el año pasado. En una nueva audiencia del caso por el asesinato de la abogada Elizabeth Vásquez, madre de ‘Elita’, las profesionales remarcaron que la joven tiene una personalidad de tipo disocial, caracterizada por el quebrantamiento de las normas morales. Además, señalaron que es egocéntrica –en tanto prioriza sus necesidades personales sobre las de los demás– y ambiciosa, al punto de ver a las personas que la rodean como objetos para conseguir lo que desea. Sobre su personalidad disocial, se detalló que ‘Elita’ adquirió esta característica desde muy pequeña. “Su madre no estuvo en los primeros años de su vida. Tiene vacíos afectivos y de aquí su carácter disocial se ha ido estructurando”, explicó la psicóloga Quiroz Sánchez. Frente a los cuestionamientos del abogado de la joven, Juan de Dios Guzmán, quien reclamó por qué no se incluyó en el diagnóstico de su defendida episodios de depresión antes de la muerte de su madre, las psicólogas sostuvieron que estos episodios no eran una tendencia que marcó su personalidad. Para la próxima audiencia, el lunes 20, las dos psicólogas debatirán con los psiquiatras Elmer Salas y Elba Plascencia, quienes hace dos semanas señalaron, ante la misma sala, que ‘Elita’ tiene un carácter trastornado y bipolar –hecho que la haría inimputable–, lo que entra en contradicción con el análisis presentado de ayer. Salió de la sala abruptamente Elizabeth Espino salió abruptamente de la sala justo cuando las psicólogas relataban ante los jueces de la Tercera Sala para Reos en Cárcel que la procesada era “oportunista, calculadora y consciente de todos sus actos”. El presidente de la sala le llamó la atención por este acto, al que consideró una falta de respeto para los presentes en el juicio. A los 10 minutos, ‘Elita’ volvió. La inmadurez es un rasgo común presente en los dos peritajes presentados.