Un megaproyecto de 252 millones de dólares está a punto de redefinir el futuro económico de Chimbote, en la región Áncash, en el norte del Perú. Su impacto no se limita únicamente al ámbito portuario, pues promete reactivar el comercio, potenciar la industria y generar millas de empleos. ¿Qué significará para la provincia de Santa y sus alrededores este cambio?
Este ambicioso plan de modernización busca transformar la infraestructura portuaria, debido a que abre nuevas oportunidades en el comercio, el turismo y la competitividad empresarial. Sin embargo, detrás de las cifras y las proyecciones, la pregunta central sigue siendo: ¿cómo logrará este proyecto catalizar el desarrollo local y regional de forma sostenible?
El megaproyecto que transformará el comercio marítimo del norte del Perú es la modernización del terminal portuario internacional de Chimbote. Este proyecto busca convertir al puerto en un centro clave para la exportación y el comercio internacional. “Este proyecto económicamente va a reactivar a toda nuestra provincia de Santa y aledaños, es decir, nuestra región va a estar en la vista del mundo”, dijo Angelly Epifanía Chávez, vicegobernadora regional de Áncash, durante una entrevista con ProInversión.
La iniciativa, que se ejecutará mediante una asociación público-privada, también contempla la creación de un fondo social para financiar proyectos que beneficien a la población local. La modernización del puerto permitirá aumentar significativamente el movimiento de carga, pasando de 2.000 toneladas anuales a más de 400.000 toneladas de carga general, posicionando al terminal como uno de los más importantes del norte del país.
La ampliación del terminal internacional de Chimbote se estima que estará lista para 2025. Foto: Asociación Peruana de Agentes Marítimos
La modernización del terminal portuario de Chimbote tiene el potencial de generar un cambio profundo en la economía local y regional. Con una capacidad ampliada, el puerto se convertirá en un motor de desarrollo que impulsará el comercio, la industria y, especialmente, el turismo. “Es importante la modernización y ampliación del puerto. Va a mejorar no solamente el comercio, sino que va a ser un mejor atractivo inclusivo para el turismo”, declaró Gilmer Zabaleta, presidente de la Cámara de Comercio de Santa.
Además, la reactivación económica traerá consigo la creación de nuevas oportunidades para empresas locales y la mejora de la competitividad en diversas actividades productivas. Según los funcionarios de ProInversión, esta transformación pondrá a la región en el radar de inversionistas internacionales, lo que contribuirá al crecimiento sostenido de Áncash y otras provincias cercanas.
Plantea atender el embarque y desembarque de carga, así como las operaciones relacionadas directamente al funcionamiento del terminal. Foto: ProInversión
La generación de empleo será uno de los principales beneficios de la modernización del puerto de Chimbote. Se estima que el proyecto creará alrededor de 2.000 puestos de trabajo directos e indirectos, lo que contribuirá significativamente a la economía local.
“La modernización del puerto generará empleo directo e indirecto, y el concesionario respetará como mínimo las condiciones laborales actuales de los trabajadores del terminal portuario de Chimbote”, explicó Ernesto Guevara, director de Proyectos Portuarios. Este incremento en la oferta laboral no solo beneficiará a los residentes de Chimbote, sino que también tendrá un impacto positivo en las comunidades vecinas, donde muchas familias dependen de la actividad portuaria.
Los trabajadores marítimos desarrollan actividades de carga, descarga, estiba, desestiba, transbordo o movilización de mercadería. Foto: Plataforma del Gobierno del Perú
El proyecto del terminal internacional de Chimbote requerirá una inversión de 252 millones de dólares, que se financiará mediante una asociación público-privada. De acuerdo con los funcionarios de ProInversión, este modelo de financiamiento estará listo para el primer trimestre de 2025 y permitirá contar con la colaboración del sector privado para ejecutar la modernización del puerto, mientras que el Estado proporcionará el marco regulatorio y el apoyo necesario.