Los ciudadanos de Lima han comenzado a compartir historias sobre un fenómeno inexplicable en el distrito de Lince. Se habla de portales dimensionales que transportan a las personas a lugares desconocidos, generando asombro y temor entre quienes han vivido la experiencia.
Desde hace más de 15 años, se han reportado múltiples testimonios de personas que aseguran haber cruzado estas puertas misteriosas. La actividad se concentra entre la cuadra 7 y 8 de la avenida Canevaro, en el cruce con el jirón Pezet y Monel, donde se han registrado encuentros sorprendentes que desafían la lógica.
Los relatos de quienes han experimentado estos portales son inquietantes y revelan un patrón común: un cambio abrupto en el entorno, seguido de un silencio abrumador y paisajes que parecen sacados de otra realidad. A continuación, exploraremos algunos de los testimonios más impactantes.
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Uno de los primeros casos documentados fue el de la familia Rojas Gamonet, quienes, tras visitar a su abuela, se encontraron en un desierto extraño, con un cielo violeta y edificios metalizados a lo lejos. La madre y sus hijas, tras un breve momento de confusión, regresaron a la normalidad sin poder explicar lo sucedido. Sin embargo, el esposo, al mirar por la ventana, se horrorizó al ver que todos los vehículos y personas estaban inmóviles, como si el tiempo se hubiera detenido.
Otro testimonio notable es el de Guillermo, quien, mientras conducía hacia una cita, experimentó un cambio drástico en su entorno. Al girar en la avenida Canevaro, la luz del día se oscureció y se encontró frente a un edificio plateado que parecía absorber la luz. A pesar de estar en una calle normalmente transitada, el silencio era abrumador. Al llegar a su destino, se dio cuenta de que había perdido casi media hora, aunque para él solo habían pasado cinco minutos.
Anthony Choy, conocido investigador de fenómenos paranormales, ha compartido sus reflexiones sobre estos eventos. En una entrevista, sugirió que los portales podrían ser una ventana al pasado de Lima, a un futuro postapocalíptico o incluso a otra dimensión. “No sé adónde [llevan las puertas dimensionales], pero de que ocurre, ocurre”, afirmó Choy, dejando abierta la posibilidad de que estos fenómenos sean parte de un misterio más grande.
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La teoría de Supercuerdas, un modelo fundamental de la física teórica, plantea que existen más dimensiones de las que podemos percibir. Según esta teoría, solo somos conscientes de tres dimensiones, mientras que en realidad podrían existir hasta once. Esto sugiere que los portales dimensionales podrían ser una manifestación de realidades que escapan a nuestra comprensión.
Los relatos sobre los portales dimensionales en Lince continúan generando interés y especulación. A medida que más personas comparten sus experiencias, el misterio se profundiza, dejando a muchos preguntándose sobre la naturaleza de la realidad y los secretos que el universo aún guarda.
¿Son estos portales una simple ilusión o una puerta a lo desconocido? La respuesta sigue siendo un enigma.