Luego de que se haya anunciado el inicio de los estudios preliminares para la construcción de la represa Iruro en el 2023, este 2024, el Ministerio de Agricultura y Riego (Midagri), a través del Proyecto Subsectorial de Irrigaciones (PSI), publicó la convocatoria para la ejecución de la obra del proyecto Acari-Bella Unión II, para beneficiar con agua a las ciudades de Arequipa y Ayacucho, potenciando la agricultura.
Este proceso de licitación comenzó el 31 de octubre y se espera que la buena pro se otorgue el 13 de diciembre del presente año. La infraestructura agrícola proyectada beneficiará a 2.665 familias, mejorando la productividad de sus cultivos. El titular del Midagri, Angel Manero Campos, comentó que este proyecto está enfocado al desarrollo sostenible y el fortalecimiento de la economía rural en la región, con el fin de evitar posibles desastres hídricos.
Imagen aérea de dónde se construirá la represa de agua para Arequipa y Ayacucho. Foto: difusión.
Con una inversión superior a S/ 192 millones, la represa de Iruro permitirá la irrigación de más de 10.250 hectáreas. Esta obra no solo revolucionará la infraestructura hídrica, sino que también transformará la agricultura familiar en los distritos de Acarí, Bella Unión (Arequipa), Lucanas y San Juan de Lucanas (Ayacucho). La capacidad de embalse será de 61 millones de metros cúbicos, con una conducción de 35,7 km.
Las metas del proyecto incluyen la implementación de un sistema de captación, un desarenador, un canal principal de conducción con tubería reforzada, así como 16 tomas principales y otros componentes esenciales para el funcionamiento eficiente de la represa.
Una de las bocatomas construidas preliminarmente. Foto: difusión.
Las empresas interesadas podrán presentar sus ofertas de manera electrónica hasta el 4 de diciembre. La evaluación y calificación de las propuestas culminará el 13 de diciembre. Una vez que inicien las operaciones de la obra, se espera un incremento en los niveles de producción agrícola, beneficiando especialmente a pequeños productores de cultivos como el olivo y el ají páprika.
Además, la diversificación de cultivos contribuirá a mitigar posibles crisis agrícolas, mejorando la seguridad alimentaria en la región. Este proyecto pretende dar un paso significativo en la modernización sostenible de la agricultura en el país.
Una de las comunidades agícolas que se verán beneficiadas por este proyecto. Foto: difusión.
Las represas de agua en Perú son fundamentales para gestionar los recursos hídricos del país, especialmente en regiones con climas áridos o donde la estacionalidad de las lluvias genera grandes fluctuaciones en el suministro de agua. Estas estructuras permiten almacenar agua durante la temporada de lluvias y liberarla gradualmente en la época seca, asegurando el abastecimiento tanto para el consumo humano como para la agricultura, la ganadería y la generación de energía hidroeléctrica. En un país donde gran parte del territorio es afectado por variaciones climáticas extremas y fenómenos como El Niño y La Niña, las represas juegan un papel clave en la adaptación a estos desafíos. Algunos puntos son: