Perú enfrenta una grave crisis ambiental con más de 30 incendios forestales activos que afectan a 22 regiones del país. De acuerdo con el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN) de Indeci, la región más afectada es Cusco, con 31 incendios registrados, seguida de Huancavelica, con 21, y Huánuco, con 17. Hasta el momento, se han reportado oficialmente 16 fallecidos, 140 heridos y 377 animales muertos como consecuencia de estos siniestros.
Los incendios forestales son cada vez más frecuentes y devastadores debido al impacto del cambio climático. Las sequías prolongadas, las altas temperaturas y la vegetación seca crean un escenario propicio para la rápida propagación del fuego.
En zonas con suelos secos, la falta de humedad provoca que las plantas emitan etileno, un gas altamente inflamable que aumenta la vulnerabilidad de la vegetación ante cualquier chispa.
A pesar de que factores naturales contribuyen a la ocurrencia de incendios, la realidad es que la mayoría de ellos son provocados por la acción humana. Es fundamental tomar conciencia sobre la importancia de la prevención y el cuidado de nuestros bosques para evitar tragedias de gran magnitud.
Los incendios forestales se vienen desarrollando en 20 de los 24 departamentos del Perú; tres de ellos, Cusco, Huancavelica y Huánuco, presentan la mayor cantidad de incendios. En un segundo orden lo siguen Amazonas, Apurímac, Arequipa, Cajamarca y Ayacucho.
Ante esta situación crítica, los bomberos voluntarios, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Sernanp) y las comunidades locales despliegan esfuerzos heroicos para combatir el fuego, sin embargo, se enfrentan a la carencia de recursos suficientes para hacer frente a la magnitud de la crisis.
A la fecha, 16 de setiembre, los incendios forestales en el Perú han provocado la muerte de 14 personas y 98 heridos, según el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci). También hay casi 2.000 damnificados. Para poder ver el mapa de calor en vivo da clic en este ENLACE.
Mapa de calor de incendios forestales. Foto: Serfor
Por otra parte, las consecuencias que pueden traer los incendios forestales es la degradación de ecosistemas y pérdida de los servicios ambientales, alteración del ciclo del agua y calidad del aire, pérdida de la fertilidad del suelo, desaparición de la flora y fauna, pérdidas de vidas humanas, afecciones respiratorias y/o visuales, así como muertes de ganado, pérdida de cultivos, plantaciones e infraestructura.