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Sociedad

Andrea Burga: la historia de la periodista ciega que lucha por las personas con discapacidad

La periodista asegura que el primer paso hacia un Perú inclusivo es garantizar la educación de las personas con discapacidad. Actualmente, los centros educativos no cuentan con planes de estudio que se adecúen a este sector de la población.

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Andrea Burga es coordinadora de proyectos de la ONG Sociedad y Discapacidad (Sodis). Foto: Composición LR/ Instagram

Este 16 de octubre, en el Día Nacional de la Discapacidad, Andrea Burga, periodista, activista y coordinadora de proyectos en la ONG Sociedad y Discapacidad (Sodis), comparte su trayectoria y lucha como persona con discapacidad visual para destacar en un país que carece de servicios públicos inclusivos y donde la población tiene una escasa comprensión sobre la discriminación hacia las personas con habilidades diferentes.

—¿Cómo iniciaste con tu activismo en defensa de los derechos de las personas con discapacidad?

—Comencé un blog llamado 'Con Capacidad', en 2014, abordando los prejuicios que enfrento diariamente como persona con discapacidad. Por ejemplo, cuando comencé a usar un bastón, las personas se preguntaban por qué salía sola a la calle, como si no fuera capaz de movilizarme por mí misma. Del mismo modo, cuando interactuaban conmigo, siempre preguntaban acerca de mi diagnóstico en lugar de preguntar sobre mis planes de estudio u otros aspectos relevantes de mi vida. Con el tiempo, empecé a compartir estas experiencias a través de otras plataformas como Instagram, Twitter y Facebook.

—¿Encontraste alguna barrera mientras estudiabas en la universidad? Después, ¿cómo fue tu experiencia al buscar empleo?

—Sí, en muchas de mis clases, los profesores no tenían disponibles libros especiales para mí. No sabían cómo adaptar sus clases para personas con discapacidad en general. No existía una educación inclusiva. Soy periodista y ese es un entorno muy excluyente. Cuando asistía a las convocatorias de empleo, no se me tomaba en cuenta. Incluso, si acudía con un acompañante, como una amiga, mostraban interés hacia ella y no hacia mí.

—¿Qué acciones se pueden tomar para lograr una educación más inclusiva?

A lo largo de la semana, estaré participando en una campaña para instar a las autoridades, especialmente al Congreso, a destinar presupuesto para la educación inclusiva. Específicamente, se busca asignar fondos para la implementación de servicios de apoyo educativo, que serán herramientas de respaldo para los docentes de educación básica regular en las escuelas. Esto facilitará el seguimiento de los estudiantes con discapacidad y proporcionará capacitación a los profesores.

La normativa actual, el Plan Marco, dispone que se creen los Servicios de Apoyo Educativo (SAE), pero para ello se necesita presupuesto.

—¿Algún consejo para que las personas sin discapacidad eliminen sus prejuicios?

—Para que las personas sin discapacidad eliminen sus prejuicios es necesario que escuchen nuestra voz y lo que tenemos que decir. Muchas veces sucede que se habla por nosotros, pero no se escucha directamente nuestras voces. Deben tener apertura para repensar las actitudes de discriminación que se encuentran interiorizadas. Es fundamental que estén dispuestos a replantearse las actitudes discriminatorias que pueden tener internalizadas. No es que las personas se despierten un día con la intención de discriminar. Siempre pongo este ejemplo: cuando me acerco a un servicio público o privado con alguien que me acompaña, las personas se dirigen a mi acompañante y no a mí. Dan por sentado que no puedo tomar decisiones y esta reacción es casi automática.

Para evitar que esta exclusión instintiva esté presente, es necesario empezar reconociendo que todos podemos tener creencias negativas hacia las personas con discapacidad. Una vez que se reconozca, se puede empezar a cambiar.