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Sociedad

No hay avances en Chosica a tres meses de El Niño

Peligro. Familias afectadas por las lluvias causadas por el ciclón Yaku siguen viviendo en sus casas dañadas cerca del río Rímac. No han sido reubicadas. Hay un lento avance en labores de limpieza. 

larepublica.pe
¿Y la Municipalidad de Lima? A pocos meses del desarrollo de El Niño, aún las autoridades del Ejecutivo y de Lima no han descolmatado ni limpiado las zonas de alto riesgo. Preocupa esto. Foto: difusión

A inicios de año, las lluvias generadas por el ciclón Yaku arrasaron con varias viviendas y calles en Chosica y Chaclacayo, donde hubo miles de damnificados que fueron puestos en carpas. Hoy, todo quedó en el olvido, y a tres meses de un posible escenario moderado del fenómeno El Niño no hay avances.

Vicky Gallegos, madre y dueña de la casa de tres pisos que se derrumbó en una de las márgenes del río Rímac, aún sigue viviendo allí desde marzo pasado.

A ella, como a tantas personas de la zona de María Auxiliadora, en Chosica, la evacuaron a una carpa cercana a los rieles del tren para que pueda ser reubicada; sin embargo, nunca sucedió. “Supuestamente, nos iban a reubicar, pero nunca pasó. Nos empadronaron para recibir el bono y hasta ahora nada”, cuenta a La República.

Vicky Gallegos ahora solo habita en el segundo piso y con el peligro latente de que el río siga carcomiendo su vivienda. ¿Y qué pasó con las carpas? No quedó nada. “Nos dieron, pero se terminaron quebrando los parantes. Pedimos otras, pero nos dieron incompletas. Aún están ahí sin armar”, señala.

Esa no es la única casa que se afectó por la fuerza de la naturaleza. Al costado hay otros vecinos que también sufrieron los mismos estragos y siguen en el mismo lugar. Incluso algunos estaban construyendo otra vez donde se había destruido.

En un recorrido por varios puntos de Chosica, sobre todo en los que están cerca del cauce del río Rímac, este medio comprobó la poca presencia de maquinaria pesada para trabajos de prevención ante El Niño.

En el puente Los Ángeles, Naña y La Cantuta se observó que la limpieza y descolmatación del cauce del Rímac no había comenzado pese a que tienen un peligro entre alto y muy alto de erosión fluvial, según el Plan de Prevención y Reducción del Riesgo de desastre del municipio de Lurigancho-Chosica.

Ángela, una residente de la urbanización California, mencionó que no ha visto ninguna acción por parte de las autoridades. “Hasta ahora no han hecho zanjas ni han hecho limpieza correcta para evitar que, si se reactiva la quebrada, se vaya justo hacia los que estamos más alejados del río”, precisó.

Riesgo. Vecinos de María Auxiliadora viven en sus casas dañadas ante la falta de reubicación. Foto: difusión

Ella lamentó que, pese al riesgo, los traficantes de terreno sigan a vista de todos y continúen dando espacios en zonas de peligro. A inicios de año, California tuvo varias pérdidas materiales tras la caída de huaicos. Muchos estuvieron en carpas proporcionadas por la comuna de Lima.

Hoy, las carpas son fantasmas. Nadie vive en estas, pero vuelven a llenarse de residentes cuando traen víveres, aseguran.

Población en riesgo

Según el último estudio Escenario de riesgo por inundaciones y flujos por activación de quebradas a nivel de cuencas de Lima metropolitana, del Cenepred, Chosica y Chaclacayo tendrían a más de 61.000 personas expuestas a riesgo muy alto a causa del fenómeno El Niño.

Hace unos días, la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios anunció el inicio de trabajos de limpieza y descolmatación en 41 kilómetros del río Rímac. Sin embargo, de acuerdo al subgerente de Defensa Civil de Chosica, Edgar Esteban Pérez, aún no se ven acciones. “Tienen a cargo 29 puntos críticos con un presupuesto de más de 49 millones de soles”.

Agregó que también la Autoridad Nacional del Agua (ANA) y el Ministerio de Vivienda están actuando, pero estos tienen a cargo solo puntos mínimos.

En esa línea, el funcionario de Chosica reiteró que pidieron al Gobierno que también intervenga otros ocho puntos críticos, pero nunca les respondieron. “Ese presupuesto de 100.000 soles no alcanza para nada. Nosotros vamos a intervenir hasta donde se pueda en esos sectores con nuestro presupuesto”.

Flor de María, una joven estudiante que lo perdió todo tras la caída del huaico en marzo, reveló que nada ha cambiado en la zona de Regatas. Le prometieron reubicarla, pero a la fecha ella sigue viviendo en las carpas.

“Nos prometieron hasta bono, pero nunca se vio nada. Ahora se vienen las lluvias, y otra vez va a pasar lo mismo y hasta peor”, dijo preocupada.

Agregó que en la quebrada Regatas aún no hay limpieza ni descolmatación, lo que genera más preocupación. “Los propios ciudadanos somos los que nos estamos moviéndonos”.

No hay obras. El puente Ñaña está en zona de alto riesgo. Foto: difusión

Urgen cambios

Para el arquitecto urbanista Aldo Facho, lamentablemente el Perú nunca ha tenido una cultura de prevención ni preparación ante fenómenos naturales.

“Estamos ante un fenómeno recurrente del que tenemos registro desde el inicio de las civilizaciones, pero, ahora, con el cambio climático, lo anómalo es la intensidad (…). Lo que está pasando es que no estamos viendo a futuro, no estamos planificando, sino que solo estamos parchando huecos que en algún momento van a reventar”, dijo.

Añadió que ya deberían tomar acciones que impliquen una mejora de políticas para despejar zonas de riesgo, ordenar sectores mal urbanizados y eliminar ocupaciones informales. Recordó la promesa incumplida del alcalde Rafael López Aliaga de reubicar a las familias que viven en zonas críticas. “No nos faltan diagnósticos de riesgo, nos sobran, lo que nos falta es actuar”.

Así, las semanas siguen transcurriendo, pero parece que para el Gobierno aún no estamos en emergencia. Con un avance de apenas 6,7%, El Niño podría ser devastador.

La palabra

Aldo Facho, arquitecto urbanista

“Ahora que viene El Niño, ¿qué hemos hecho de diferente o qué hicimos durante el ciclón Yaku? Aún recuerdo la promesa del alcalde López Aliaga de reubicar a las familias. ¿Lo hizo? ¿Dónde están?”.