Un equipo del Ministerio Público, encabezado por la fiscal Cinthya Gamarra Oliva, arribó de Lima a la ciudad de Cusco para las diligencias sobre las muertes de Remo Candia Guevara y Rosalino Flórez Valverde, ocurridas durante las manifestaciones en contra del gobierno de Dina Boluarte, en enero último.
Junto a peritos de la Policía se dirigieron hasta las intersecciones de las avenidas La Paz y 28 de julio, en el distrito de Wanchaq. Allí, el 11 de enero cayó malherido el dirigente comunal Remo Candia, tras recibir un impacto de bala que desencadenó su muerte.
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Amilcar Huamán, amigo de la víctima, contó a las autoridades lo que presenció ese día cuando intentó socorrer a Remo Candia, al ver que tenía un balazo en el vientre. “No vi el punto donde cayó, pero conversé con los amigos que acompañamos a Remo, ellos me indican y saben de qué lugar salió la bala, pero se sienten amenazados, a tal punto que cambiaron sus números de celular y no quisieron venir a las diligencias por temor", dijo el testigo.
Huamán declaró ser blanco de amenazas y que lo llaman para intimidarlo y conminarle a que no testifique en el caso. “Pedí las garantías a la fiscal. Hasta el momento soy perseguido por la policía”, dijo.
Familiares de las víctimas exigen justicia. Foto: La República
Miriam Lima, viuda del fallecido dirigente, mostró su molestia por el retraso de las investigaciones. “Solo verificaron el lugar donde cayó mi esposo, esto debió hacerse a los pocos días del suceso, queremos que de una vez salgan los responsables (...) la fiscalía ya tendría las identidades de los que dispararon”, manifestó.
La madre y la hermana de la víctima pidieron justicia por la vida de Remo Candia, que dejó tres menores hijos en la orfandad.
Las autoridades también llegaron a la avenida 28 de julio, donde el joven estudiante de cocina, Rosalino Flórez Valverde, recibió una ráfaga de perdigones, por parte de un efectivo policial; aquel 11 de enero. Raudamente hicieron mediciones y recabaron los testimonios del hermano y el primo de Rosalino. Juan Flórez, hermano del fallecido, declaró que en las diligencias se observó a abogados que serían del policía que disparó contra la víctima por lo que presume que se tendría su identidad.