Luego de que Dina Boluarte Zegarra anunció ante todo el país que se quedará como presidenta de la República hasta el fin del mandato, es decir, hasta julio del 2026, las reacciones en la región Lambayeque no demoraron. Desde el norte se considera que la permanencia de la mandataria en el poder agravaría la crisis social y la inestabilidad política.
"Al asumir el cargo (de presidenta) dijo que convocaría a elecciones generales para el 2024. En ese sentido, tiene que cumplir su palabra. La permanencia de Dina Boluarte agravaría la crisis social, porque, eventualmente, se pueden generar problemas sociales en el sur. Se tienen que ir ambos (Ejecutivo y Legislativo)", declaró el presidente del Consejo Regional de Decanos (Conrede) Lambayeque, Carlos Burgos Montenegro.
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Similar opinión tuvo el exgobernador de Lambayeque, Humberto Acuña Peralta. Para la otrora autoridad regional, Boluarte Zegarra tiene una actitud de "soberbia" al retar con su anuncio a los gremios y grupos sociales que han convocado a nuevas masivas manifestaciones en la capital peruana para exigir su inmediata renuncia y nuevos comicios.
"En estos seis meses (de mandato) no vemos su ruta clara ni mayores logros, y algunos de sus ministros están cuestionados. Evitar nuevas elecciones provocaría un levantamiento en el sur del país. Creo que la tranquilidad pública y la estabilidad política del país están en riesgo con sus inoportunas declaraciones", manifestó Acuña Peralta.
A su turno, el coordinador regional de la Asamblea de Delegados de las Organizaciones de la Sociedad Civil de Lambayeque (Adoscil), Jorge Alarcón Gasco, también se refirió a las controversiales declaraciones de la jefa de Estado.
Para el dirigente existe un exceso de confianza de parte de la presidenta y es una evidente "provocación" para quienes están en contra de su presencia en el Palacio de Gobierno. "Lo que manifiesta ella es un exceso de confianza y una provocación a la ciudadanía que, de momento, está pasiva. Por supuesto que agravaría la crisis social en el sur. El norte está descontento con el manejo del dengue, por lo que podría haber una reacción. Boluarte está mal asesorada y eso se evidencia en sus expresiones", refirió.
En La Libertad, también están en contra que la mandataria piense mantenerse en el cargo hasta cumplir su mandato, Entre ellos, el polémico alcalde de Trujillo, Arturo Fernández Bazán, es una falta de respeto al pueblo y Dios, lo que menciona la mandataria.
"Es muy preocupante lo que dice Boluarte. Eso es una falta de respeto al pueblo, quien no la quiere a ella ni al Congreso. Además, ella puede desear muchas cosas, pero a las finales es Dios quien manda", dijo la autoridad de Trujillo.
Para el secretario de la CGTP de La Libertad, Carlos Rosales, hay una conveniencia entre el Ejecutivo y Legislativo por eso desean seguir en el poder. "El pueblo le ha exigido que se vaya ella y todos los congresistas, es un modo de dictadura que señalan que se van a quedar hasta el 2026. Como se está anunciando una toma de Lima, la mandataria diga que no procede o cuántos muertos más quieren, eso lo tomamos como amenaza y se rechaza rotundamente. El Legislativo y el Congreso tienen una especie de matrimonio con intereses ajenos a la población", indicó.
"Están esperando que el pueblo reaccione y salgan a las calles. Para el mes de julio estamos organizando una gran movilización como CGTP", agregó el dirigente sindical.