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Sociedad

Cajamarca: corso carnavalero volvió recargado de lecciones de vida

El municipio provincial de Cajamarca informó que pasaron la meta propuesta, porque estimó recibir un promedio de 50.000 turistas y la cifra llegó a 70.000 visitantes durante los días centrales. Se estima que un promedio de 150 millones de soles ha dejado la organización del presente carnaval.

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La belleza de las mujeres fue otro de los atractivos del carnaval de Cajamarca. Foto: Rosa Quincho / URPI-LR | Rosa Quincho / URPI-LR

El majestuoso corso del carnaval de Cajamarca desbordó magia y creatividad, pero también nos permitió conocer historias que son ejemplo de superación ante los obstáculos que se presentan en la vida. Bajo el fuerte sol y en medio de la algarabía, conocimos a Virginia, una paciente oncológica de 88 años, que contagió con su sonrisa a pequeños y grandes. Ella llegó desde su natal Cutervo para continuar con su tratamiento médico y aprovecho la ocasión para asistir, con su hija, al desfile de carros alegóricos. Todo coincidió. Se ubicó en primera fila y flameó su pañuelo blanco a ritmo de música y como un símbolo de paz.

Anciana de 88 años disfrutó del carnaval. Foto: Rosa Quincho/URPI-LR

El perrito carnavalero

En el recorrido, también encontramos a Randú, un perrito de 10 años que desfiló vestido de inca. La mascota acompañó a su delegación durante horas y fue el centro de atención de los visitantes. Su amigo Casimiro mostró un gran amor por los animales y en cada parada le dio de beber agua. Además, contó que este es el segundo carnaval en el que participa el can.

El can fue una de las atracciones del desfile. Foto: Rosa Quincho/ URPI-LR

Anayely, Samir y Keyla

Al pasar los minutos, desde el fondo de una calle, vimos aparecer a niños y adultos con vestimentas de color verde y blanco. Un cartel indicaba que pertenecían al caserío Río Grande, que se ubica a una hora y media de Cajamarca. Entre ellos, participaban Anayely, Samir y Keyla, tres primos que llevaron disfraces del coronavirus. Los menores convirtieron los momentos difíciles de la pandemia en esperanza.
“El Covid-19 fue un tiempo muy doloroso, porque perdimos a familiares cercanos y hoy queremos rendirles un homenaje con esta representación”, refirieron.

Niños se disfrazaron de coronavirus. Foto: Rosa Quincho/URPI-LR

La más pequeña

El gran corso avanzaba, cuando nos detuvimos a entrevistar a la bailarina más pequeña del carnaval del reencuentro. Se trata de Dina Margarita, de 20 años, quien mide 1.20 m. La joven indicó que estudió secretariado ejecutivo y le gusta la música.

Pequeña artista bailó como grande. Foto: Rosa Quincho/URPI-LR

Coloridos trajes

Las horas pasaban, pero la fiesta no se detenía. En ello, nos encontramos con Merly y Micael, una pareja joven de esposos que junto a Thiago, su niño de dos años, sorprendieron con sus coloridos trajes en tonos fucsia y dorado, que ellos mismos elaboraron con meses de anticipación. “Nos gusta el arte y queremos inculcar nuestras tradiciones a la nueva generación. El carnaval es pasión”, señalaron.

Familia desfiló con coloridos trajes. Foto: Rosa Quincho/URPI-LR