El 30 de enero es el plazo para que se inicien las operaciones en la segunda pista de aterrizaje y la nueva torre de control en el aeropuerto internacional Jorge Chávez; sin embargo, es poco probable que se cumpla ese plazo, debido a que es necesario que se ejecuten una serie de actividades, entre ellas el entrenamiento de los controladores de tránsito aéreo en escenarios similares a los que tendrán como parte del proyecto de ampliación del Jorge Chávez, y la implementación del sistema meteorológico denominado AWOS, el cual conforma el sistema de aterrizaje de precisión de dicho aeropuerto.
Sobre la capacitación de los controladores, CORPAC había coordinado un programa de entrenamiento por la FAA (Federal Aviation Administration) en USA, una de las instituciones de mayor prestigio mundial en la gestión de tránsito aéreo, pero se canceló por instrucciones del exviceministro del MTC, Sr. Luis Rivera (sentenciado a 6 años de prisión por delitos de corrupción). En este caso, el director de Corpac, Jorge Salinas dispuso la cancelación de dicho entrenamiento, sin tener un plan alterno de capacitación y debido al reclamo de muchas instituciones, está gestionando un curso en Europa a un costo de aproximadamente 300,000 euros.
Además, hubo serios problemas en el suministro del sistema meteorológico AWOS. Tanto el proceso de entrenamiento en fábrica, como el de pruebas de aceptación en fábrica, ha tenido un retraso de 4 meses. El contratista tiene una ampliación de plazo contractual de 72 días y por tanto la fecha de entrega del sistema AWOS es a mediados de marzo 2023. Pero el total de las partes del sistema AWOS aún no llega a CORPAC, por lo que no serán instalados hasta marzo de 2023. A este plazo deberá sumarse el de la integración al sistema de aterrizaje y certificación, por lo que no se puede hablar de inicio de operaciones hasta después de abril de 2023, de tal forma que es imposible que las operaciones aéreas en la nueva Torre de Control y Segunda Pista del Aeropuerto Jorge Chávez puedan iniciarse en enero de 2023.
El presidente de Corpac, Jorge Salinas, ha dicho reiteradas veces que las operaciones se iniciarán en enero de 2023, pero es imposible operar sin personal de tránsito aéreo entrenado y sin el sistema de aterrizaje instalado a plenitud, de esta forma está propiciando el incumplimiento del Estado Peruano respecto el Contrato que se tiene con el concesionario Lima Airport Partners - LAP y expone al Gobierno a una penalización a favor de LAP de aproximadamente 500 millones de dólares.
Como se sabe, el 30 de enero vence el plazo que el Estado peruano le dio al concesionario del principal aeropuerto del Perú, después de esta fecha, el Estado debería empezar a aplicar las penalidades, según contrato, pero esto no será así, pues existe un acta firmada en la gestión del sentenciando por corrupción exviceministro Luis Rivera Pérez, que deja las puertas abiertas al concesionario para aplicar las penalidades por incumplimiento del Estado Peruano.
PUEDES VER: Controladores aéreos: aumento de tráfico en el cielo pone en peligro a miles en aeropuerto Jorge Chávez
La República se comunicó con el área de prensa del MTC para que informe de forma oficial si se cumplirá con el inicio de operaciones el 30 de enero, pero hasta el momento no dan su versión.
Cabe la posibilidad que Salinas disponga y coordine una inauguración de muestra con algún vuelo de prueba el 30 de enero, pero eso no se puede considerar como el inicio de operaciones.
Todo esto viene siendo avalado por la titular del MTC, quien manifestó ante gremios de trabajadores de Corpac que iba cambiar a Salinas y anunció la reorganización de Corpac, pero eso no ha sucedido.
Fuentes de Corpac indican que la protección a Salinas es por la cercanía que tiene con el moqueguano Carlos Revilla, uno de los hombres de confianza de Vizcarra que tiene poder en el MTC. Cabe indicar que, si el 30 de enero no se inician las operaciones, por el motivo que sea, ya se configuró el incumplimiento del Estado y la penalización sería a favor de LAP.