Elena Pinto Delgado (42) era viuda y madre de una hija de 22 años y un niño de 10. Desde la muerte de su esposo, ella asumió el rol de padre y madre, pero nada hubiera sido fácil si su suegro, Víctor Lima Huayapa (72), no la hubiera ayudado. Él pasó de ser abuelo a padre.
Es por ello que Elena lo respetaba y quería por su figura paterna. El martes 23 de agosto, antes del mediodía, suegro y nuera se fueron en el automóvil con dirección hacia La Colina, un poblado que está pasando el peaje de Uchumayo en Arequipa, donde pretendían comprar un terreno.
Sin embargo, a menos de 500 metros del destino, les llegó la muerte. Su auto V9S-414 quedó destrozado por el tráiler de placa C3U-802, que era manejado por Víctor Huamaní Choque (44).
Cuando Elena fue rescatada y vio a su suegro en la pista, gritó “no lo dejen morir, sálvenlo a mi papá, sálvenlo”; lamentablemente, ella también murió de camino al hospital.
Los tres cuerpos fueron retirados este miércoles 24 de agosto de la morgue, y la familia exigió justicia. “Mi sobrino se queda huérfano con 10 años y su hermana de 22 queda sin apoyo para sus estudios, no es justo”, dijo un tío.