Áncash. La fiscalización de la Superintendencia Nacional de los Servicios de Saneamiento (Sunass) realizada a 21 Juntas Administradoras del Servicio de Saneamiento (JASS) de las provincias de Casma Huarmey, Pallasca, Santa y Sihuas, en lo que va de este año, permitió conocer las deficiencias en el abastecimiento de agua potable a 5.000 pobladores del ámbito rural.
Según se detalla en una nota informativa, se detectó que las JASS carecen de manuales de operación y mantenimiento de sus sistemas. Además, faltan procedimientos de reclamos para sus usuarios, no existen registros de limpieza y desinfección de los reservorios, y no se mantiene actualizado el registro de ingresos y egresos por la prestación de los servicios.
Estas labores también evidenciaron la ausencia de sistemas de cloración e inexistentes trabajos de mantenimiento a las estructuras de saneamiento, ante lo cual se exhortó tomar acciones urgentes. Asimismo, los resultados de la evaluación indican que más del 60% de las JASS no cuenta con constancia de inscripción, reconocimiento y registro que otorgan las municipalidades.
“Los informes fueron remitidos a las municipalidades distritales, para que tomen conocimiento de la situación y se adopten las acciones necesarias. Además, se notificó a la Dirección Regional de Vivienda, Dirección Regional de Salud, al Centro de Atención al Ciudadano del Ministerio de Vivienda y a la Contraloría General en Áncash”, agrega la Sunass en su publicación.
Agua sin clorar agua potable áncash
La entidad refiere que en 2021 se realizaron 21 evaluaciones a prestadores que abastecen a 6.000 habitantes del ámbito rural. Durante el 2022, la oficina de la Sunass en Chimbote tiene programado hacer un total de 33 evaluaciones de los servicios de saneamiento en el ámbito rural en las provincias de Casma, Corongo, Huarmey, Pallasca, Santa y Sihuas.