Las comunidades de la selva central viven un momento crítico caracterizado por el miedo de ser atacados e incluso asesinados luego de que narcotraficantes acabaran con la vida de cuatro líderes Kakataibo a manera de represalia por los operativos de erradicación de cultivos de hoja de coca.
Esta “narcoviolencia” ha sido denunciada por la Federación Nativa de Comunidades Kakataibos (Fenacoka), que, a través de un comunicado difundido este lunes 4 de julio, dio a conocer que se está enfrentando a una ola de acoso, amenazas e intimidaciones.
“Estos operativos han generado acciones de represalia inmediata de parte de los narcotraficantes instalados en la zona (...). La selva central peruana sufre un incremento de violencia por actividades económicas ilícitas”, manifestó.
Si bien los integrantes de la Fenacoka reconocen que los operativos realizados por la Policía y los militares contra el narcotráfico constituyen “un hito importante” y “el primer golpe real” al flagelo en mención, afirman que las autoridades no han respondido a los pedidos de las organizaciones indígenas respecto a la “necesidad de acompañar” estas acciones.
“Caso contrario, este tipo de intervenciones parciales dejan a las comunidades que hacen las denuncias expuestas a las represalias de los invasores armados. Cosa que ya está sucediendo”, advirtieron.
“Uno de nuestros comuneros fue atacado por tres hombres armados, quienes lo golpearon, obligándolo a arrodillarse, para luego exigirle que le revele la ubicación de los líderes, quienes ‘trajeron a la Marina a erradicar’, amenazándolo de muerte”, reportaron.
PUEDES VER: Cuarta ola: uso de mascarillas vuelven a ser obligatorias en espacios abiertos y cerrados desde julio
De esta manera, informaron que las comunidades nativas de Mariscal Cáceres, Unipacuyacu, Yamino, Puerto Azul y Santa Martha, junto a otras en las cuencas de los ríos Aguaytia, San Alejandro y Sungaroyacu, son las que vienen siendo afectadas.
Por ello, la Federación Nativa de Comunidades Kakataibos solicitan medidas de protección con intervención de la PNP “para salvaguardar la vida de todos sus miembros”.