Tras el motín de un grupo de menores infractores del Centro Juvenil de Diagnóstico y Rehabilitación José Quiñones Gonzáles, ubicado en el distrito de Pimentel, provincia de Chiclayo, los vecinos de la urbanización Fermín Ávila Morón piden la reubicación de este penal por la zozobra que causa en más de 800 familias.
“A través de los años, los presos se han escapado con y sin policías. Años anteriores establecí expedientes para pedir la reubicación y no se nos daba. Hemos hecho un segundo expediente que aún no tiene respuesta y esperamos que finalmente se pueda dar y sea satisfactorio”, indicó el teniente gobernador del sector, Manuel Tejada, a La República.
Agregó que hace más de tres años presentan el malestar porque siempre que se dan casos de fugas se genera zozobra y estos pueden traer consecuencias, como el ingreso de los menores a las casas, tomar de rehenes a las familias y demás cosas.