Trabas. Ricardo Mendoza y Norka Gaspar, en su canal de YouTube, no solo se burlaron del acoso sexual contra una menor de edad en el transporte público, sino que también se mofaron de una persona con discapacidad auditiva que no puede dar su consentimiento para tener relaciones sexuales.
A raíz de esto, Moisés Piscoya, intérprete de lengua de señas peruana de TV Perú, recordó la realidad y limitaciones que tienen que afrontar decenas de niñas y mujeres de esta comunidad que sufren agresiones sexuales en el país.
En el programa Sálvese quien pueda, el especialista explicó que las víctimas con discapacidad auditiva no pueden avanzar con sus denuncias porque no hay ningún intérprete acreditado en el país que pueda apoyarlas hasta el final del proceso. “Todos somos empíricos”, subrayó.
Según detalló el experto, ninguna persona con conocimientos en la lengua de señas puede acceder a este reconocimiento porque el Ministerio de Educación (Minedu) aún no ha creado un perfil para esto.
“Durante todos estos años, más en pandemia, se ha agudizado el acoso y las violaciones contra las mujeres sordas. Cuando se hace la denuncia, normalmente va la víctima con un familiar para poder interpretar, pero cuando la denuncia avanza es imposible porque el fiscal pide que el intérprete tenga acreditación”, recalcó Piscoya este miércoles.
Finamente, el especialista hizo hincapié en la importancia de implementar un perfil, el cual también permitiría que se cree la carrera de intérpretes profesionales en el país.
Con este primer paso, las y los intérpretes empíricos podrán recibir su acreditación ante el Ministerio de Trabajo y así tendrían la posibilidad de acompañar a víctimas de la violencia machista.
“La acreditación laboral es con el Ministerio de Trabajo, pero ellos no pueden proceder sin tener aprobado el perfil que lo hace el Ministerio de Educación en conjunto con Conadis, que es el ente rector”, explicó ante Perú 21.
Si usted ha sido o conoce a alguien que fue afectada o involucrada en hechos de violencia familiar o sexual, comuníquese de manera gratuita a la Línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, que cuenta con un equipo especializado en “brindar información, orientación y soporte emocional”.
Además, la Línea 100 tiene la facultad de derivar los casos de violencia familiar o sexual más graves a los Centros de Emergencia Mujer o al Servicio de Atención Urgente. Este servicio atiende las 24 horas, todos los días del año (incluye feriados).