Las rondas campesinas de Carabaya dictaminaron que Richard García Chislla, asesino confeso de su esposa quien se hallaba desaparecida desde el 9 de enero, deberá pasar por una cadena ronderil.
Esta es una costumbre que supone ser llevado a varios lugares para que sea conocido por toda la población y esto genere un escarmiento. En el tiempo que es pasado de pueblo en pueblo, es obligado hacer trabajos comunales.
Posterior a esta acción recién sería entregado de manera formal al sistema de justicia ordinario. García Chislla, aún permanece en manos de las autoridades comunales de Carabaya.
Agustina Sucapuca Mamani, presunta actual pareja del principal sospechoso, también se encuentra retenida. Ambos fueron llevados a la Plaza de Armas de Macusani.
Richard García confesó que participó del crimen de su esposa, pero no aceptó ser el asesino material. Dijo que otras dos personas más estarían implicadas.
Familiares de la víctima exigen cadena perpetua para el varón. Piden que el caso sea sancionado e investigado públicamente en presencia de las autoridades comunales.
Si usted ha sido o conoce a alguien que ha sido afectada o involucrada en hechos de violencia familiar o sexual, puede comunicarse de manera gratuita a la Línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, que cuenta con un equipo especializado en “brindar información, orientación y soporte emocional”.
Además, la Línea 100 tiene la facultad de derivar los casos de violencia familiar o sexual más graves a los Centros de Emergencia Mujer o al Servicio de Atención Urgente. Este servicio atiende las 24 horas, todos los días del año (incluye feriados).