Una representación gigante de la cultura moche, cerca de las huacas del Sol y la Luna (Trujillo, La Libertad) ha causado impresión y polémica esta semana. El monumento, que emula un huaco erótico de la civilización precolombina, se ha convertido en una nueva atracción de la localidad. Descubre aquí cuál es su significado y por qué ha generado controversia.
El Huaco erótico ha provocado bastante controversia entre los lugareños. Foto: Municipalidad Distrital de Moche
César Arturo Fernández, alcalde del distrito de Moche, indicó que se trata de una donación por parte de un artista plástico que quería mostrar su talento y contribuir con la cultura del sector. “Un artista plástico ha solicitado permiso para que lo coloque ahí. Nosotros los mochicas siempre hemos resaltado por dos tipos de huaco: el huacoretrato y el erótico. En nuestra cultura no representaba eroticidad, sino la deidad hacia dios, cuando había muchas lluvias”, indicó Fernández al medio Santuario Perú.
El monumento de tres metros ha generado cierta polémica en los lugareños; sin embargo, este tipo de suceso no es el primero. En el 2019, el departamento de La Libertad y los pobladores de la citada jurisdicción expresaron la ‘falta de criterio’ cuando se colocaron huacos eróticos representativos de la cultura en una de las principales entradas del distrito.
El desacuerdo se generó porque fueron colocados en una pared ubicada en una vía de acceso principal, donde estudiantes de todas las edades transitan para ir a sus instituciones. Asimismo, las quejas fueron principalmente por los niños que pasaban cerca al muro y preguntaban a sus padres sobre el tema, lo que provocó incomodad en las familias.
Para sumergirse en la historia de los huacos eróticos, que eran de barro y que tuvieron mayor proliferación en la costa norte del Perú, hay que destacar que, antes de la cultura mochica, civilización preincaica que consagró este arte, ya habían sido elaborados, aunque con menor éxito, por otras culturas, como la vicús, virú y salinar.
“Gracias al íntimo conocimiento del cuerpo y del alma, el hombre mochica, al revelarse en su arte, nos permite hoy leer como en un libro abierto toda su vida y hacer un estudio no solo de sus reacciones espirituales, sino también, en forma vívida, de todas las manifestaciones humanas”, escribió el pionero de la arqueología peruana Rafael Larco Hoyle, en su libro Los mochicas. “En la cerámica, por eso, se halla perfectamente evidenciado el sentimiento religioso más puro, así como las manifestaciones más abyectas del erotismo”, agregó.
Este tipo de trabajos no solo representaba a personas, entre heterosexuales y homosexuales —a los que se les confería poderes sobrenaturales y se les consideraba fuentes de buena suerte, de acuerdo a la investigación del educador Enrique Martínez-Salanova Sánchez compartida en su blog—, sino también a la flora y la fauna local, como perros, sapos, etc.
El Huaco erótico, que tiene tres metros de altura, ha provocado bastante controversia entre los lugareños. Foto: Municipalidad Distrital de Moche
Asimismo, Rebeca Carrión comenta en su libro La religión en el antiguo Perú que “fueron inspirados por el anhelo vital del indio de obtener abundancia de alimentos de su actividad básica, la agricultura”.
En el museo Larco, que fue fundado en 1926 por el mismo Larco Hoyle y que tiene cerca de 45.000 piezas arqueológicas, se describe al erotismo de la cultura mochica.
“Las representaciones eróticas en el antiguo Perú alcanzan su esplendor (…) con la cultura mochica, no solo por el volumen sino sobre todo por la habilidad artística expresada en cada una de ellas. Con un profundo conocimiento de anatomía, el artista mochica esculpe fragmentariamente el cuerpo humano y acabadas representaciones de los genitales, el acto sexual y el parto. En todas las piezas se muestra a la perfección el detalle: elaboradas con maestría no se limitan simplemente a reproducir, son verdaderos retratos psicológicos”, reza la descripción.
Este tipo de expresiones culturales son importantes porque definen las costumbres, en este caso, sexuales de una determinada comunidad como, ahora, la de la cultura mochica. Según Rafael Larco Hoyle, en su libro Checa, están divididos en cuatro tipos: los que representan erotismo naturalista (coito que lleva a la fecundación y que evita la concepción); los que representan erotismo religioso; los vasos moralizadores y los vasos humorísticos.
El pionero de la arqueología peruana Rafael Larco Hoyle fue el fundador del Museo Larco. Foto: Museo Larco
En el primer caso, respectivamente, indicó que se habría “aceptado los vasos representativos de coitos naturales como ofrenda funeraria por un motivo de vital transcendencia, el de la fecundación o propagación de la especie (…) a fin de evitar la concepción”. En el segundo caso, aseguró que “los mochicas quisieron “con estas escenas convertir a su Divinidad en el centro del poder de la fecundación. Buscaron divinizar el amor para dejar un testimonio de que el amor es la fuerza creadora del mundo”.
El monumento de tres metros ha generado cierta polémica en los lugareños; sin embargo, este tipo de sucesos no es el primero. En el 2019, el departamento de La Libertad y los pobladores de la citada jurisdicción criticaron la ‘falta de criterio’ cuando se colocaron huacos eróticos representativos de la cultura en una de las principales entradas del distrito.
La réplica, que representa la fertilidad, fue destruida. Durante la madrugada del último martes 4, la figura amaneció con un gran hueco en la parte superior del falo. El alcalde distrital Arturo Fernández Bazán denunció el hecho. “Es un acto lamentable. Aproximadamente a las 3 a. m., tres delincuentes armados, con arma blanca, amenazaron al sereno (que brindaba seguridad a la estructura), mientras los otros dos rompieron el falo. Luego se escondieron entre los cañaverales”, explicó a la prensa. El sereno no quiere dar declaraciones debido a que habría sido amenazado de muerte.
Como se sabe, el erotismo está presente en la cultura Mochica, en la que hay una representación importante de piezas de cerámica que hacen alusión al deseo, atracción y unión de fuerzas opuestas. Estas son denominadas como los huacos eróticos. En la ciudad de Lima, el Museo Larco Herrera cuenta con una gran exposición de este arte preincaico, la cual se divide en cinco espacios diferentes. Estos son:
Medios de comunicación de la región, como Chile o Brasil; de más al norte, México; y de otros continentes, como de Reino Unido, realizaron reseñas con variados y llamativos enfoques sobre el huaco erótico moche. La agencia internacional EFE hizo un amplio informe sobre el huaco erótico gigante, que incluye fotos y video. Este medio brindó detalles del tamaño de la escultura, a la cual denominó como la “estatua con enorme falo”, y pudo conversar con el alcalde de Moche, Arturo Fernández Bazán.