Ayacucho. En una ceremonia pública, efectuada en el centro poblado de Carhuahurán del distrito de Uchuraccay de la provincia de Huanta, el Ministerio Público realizó la entrega digna de los restos óseos y elementos asociados de 15 víctimas que perdieron la vida en tiempos de violencia interna.
El acto se concretó tras la intensa labor de los integrantes de los profesionales de la Primera Fiscalía Penal Supraprovincial Especializada en Derechos Humanos, Interculturalidad y Delitos de Terrorismo con Competencia en el Distrito Fiscal de Ayacucho, del Equipo Forense Especializado (EFE), de la Dirección General de Búsqueda de Personas Desaparecidas (DGBPD) y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
La ceremonia fue presidida por el fiscal provincial Reiner Salinas Mendoza, quien además destacó la lucha incansable de los familiares de las víctimas y el apoyo de las psicólogas de la Unidad Ejecutora Red de Salud Ayacucho Norte, quienes brindaran el acompañamiento psicosocial a los deudos presentes en la actividad.
La diligencia de armado de restos óseos y elementos asociados fueron armados un día antes en el mismo lugar.
El 15 de enero de 1991, aproximadamente a las 05:00 a. m., unos 30 miembros de Sendero Luminoso incursionaron en el anexo de Huayñun y en Carhuahurán, en donde quemaron viviendas y asesinaron a 20 pobladores para después retirarse.
Frente a ello, los sobrevivientes, junto con los moradores de las comunidades cercanas, se reunieron y decidieron perseguir a los terroristas, pero fueron sorprendidos y capturados por los subversivos que se habían escondido en el paraje Quiñacc, y fueron victimados en la zona los ciudadanos Pablo Romero Huamán, Juan De Dios Velasque Romero, Antonio Curo Coronado y Teodosio Velásquez Lunasco.
A tres de ellos les quitaron la vida con un explosivo, lo que dejó a sus cuerpos destrozados y desperdigados.