Este 2021, Perú será sede de la Segunda Cumbre de Mujeres Indígenas de Abya Yala, en la que se reunirá a más de 1.000 mujeres de pueblos originarios.
La cumbre se realizará entre el 14 y 18 de octubre en Lima y participarán las lideresas de los pueblos indígenas de Latinoamérica para definir una agenda conjunta a favor de los derechos de las mujeres originarias.
“El objetivo principal es iniciar una fuerte alianza estratégica en América Latina para hacer respetar nuestros derechos”, ha explicado en una rueda de prensa virtual Lourdes Huanca, presidenta de la Federación Nacional de Mujeres Campesinas, Artesanas, Indígenas, Nativas y Asalariadas del Perú (Fenmucarinap).
En esta cita internacional se abordarán temas como la crisis climática, el ambiente, la igualdad de género y el derecho al buen vivir.
“La lucha es una sola, en defensa de la Pachamama, en defensa del agua, del territorio y de nuestro cuerpo”, agregó la presidenta de la Fenmucarinap, una de las entidades organizadoras el evento.
En la rueda de prensa sobre la presentación de la cumbre, participaron dirigentes nacionales e internacionales, de Bolivia, Guatemala, México, Paraguay y Ecuador.
Las organizadoras insistieron en la necesidad de “trazar alianzas” y articular una agenda conjunta que visibilice la problemática de las mujeres indígenas en Latinoamérica y exhorte a los gobiernos regionales a impulsar políticas públicas a favor de sus derechos.
Por su parte, Angélica Ponce, ejecutiva de la Confederación Sindical de Mujeres de Comunidades Intelectuales de Bolivia (Csmcib), ha destacado la importancia de “trenzar la unidad para resistir” a flagelos como el “patriarcado” y la “derecha” y aseguró que, como madres, tienen la “obligación” de proteger sus derechos para “dejar un futuro mejor” a sus hijos.
Los resultados de este encuentro se presentarán ante el Foro Permanente de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
La Primera Cumbre Internacional de Mujeres de Abya Yala se realizó en mayo pasado en Bolivia, donde se conformó un comité de defensa para prevenir los índices de violencia contra las mujeres y feminicidios.