El gobierno regional Luis Hidalgo informó que el último deceso causado por la COVID-19 en Madre de Dios se produjo en los primeros días de julio, y en casi tres semanas no se han registrado más reportes de defunciones por esta enfermedad.
Además, sostuvo que este significativo descenso se debe a los avances del proceso de vacunación contra el virus; sin embargo, falta llegar al grueso de la población de 40 años, además de superar las enormes dificultades que tienen para llegar a las zonas más alejadas en esta región de la Amazonia.
No obstante, en la provincia del Manu, donde se ubica la gran mayoría de comunidades indígenas, se han realizado campañas de sensibilización y se ha pedido la colaboración de la Fuerza Aérea del Perú (FAP) para trasladar equipos y brigadas de inmunizadores y cumplir con el objetivo de vacunar a toda la población.
Hasta el momento, se ha vacunado a 18.591 personas con la primera dosis y 10.240 con la segunda dosis, y según esta misma estadística se estima que un promedio del 44,92% de la población objetivo no acudió para su inoculación por segunda vez.
Hidalgo agregó que para contrarrestar esta situación se está aplicando la estrategia de vacunación casa por casa, haciendo que brigadas de vacunadores acudan a los domicilios de estas personas para cumplir con su segunda dosis.
Por último, recomendó que en estas fiestas, la población tome en cuenta las medidas de prevención y cumpla estrictamente los protocolos de bioseguridad, como el distanciamiento, uso de doble mascarilla, lavado constante de manos, protector facial y evitar cualquier tipo de reuniones con la familia o amistades.