Información: Mary Luz Aranda / URPI-GLR
Trabajadores de casinos y tragamonedas protestan solicitando que autoricen reabrir los establecimientos de este rubro. Según Magali Medina Morante, vocera de la movilización, son alrededor de 87.000 personas afectadas por el cierre y muchos de sus compañeros deben laborar como informales ante la falta de recursos económicos.
“Ya es casi un año que la mayoría de nosotros está sin trabajo, desde marzo del año pasado. En diciembre pudimos abrir solo al 30%. Cómo cree que nos encontramos más de 87.000 mil peruanos si no tenemos un sustento, si no tenemos trabajo”, sostuvo.
Indicó también que el 75% de trabajadores en este rubro son mujeres, quienes deben mantener a sus familias o que sostienen sus estudios con estos ingresos. Lamentablemente, muchos de estos locales han quebrado, dejando sin trabajo a cientos de peruanos.
“Nosotros, a marzo del 2020, éramos 700 salas, porque todos las salas de tragamonedas y casinos somos al 100% formales. (...) De 740 salas hasta el mes pasado ya habían quebrado 300”, precisó.
Finalmente, consideró que los casinos y tragamonedas deberían volver a operar, ya que son los establecimientos más fiscalizados.
“El gobierno y todos nosotros sabemos que no somos un foco de contagio. Tenemos el protocolo más estricto de la región. Sin embargo, yo creo que es una cuestión de discriminación. No los entiendo, solo pedimos trabajar “, recalcó.