Los fallecimientos diarios por coronavirus en la región Lambayeque siguen en aumento a pesar de los esfuerzos del personal sanitario de la primera línea. La Gerencia Regional de Salud (Geresa) informó que entre el 19 y el 20 febrero se reportaron un total de 16 decesos a consecuencia de esta enfermedad.
Con esto, en lo que va de febrero, se reporta la muerte de 219 personas por la COVID-19 en Lambayeque, según datos de la propia Geresa. Este mes aún no ha terminado pero se estima que superará las defunciones reportadas en diciembre del 2020 (225), mes en el que se registró un repunte de cifras desde que en noviembre se comunicaron solo 180 decesos.
Los contagios en esta región norteña han llegado a los 37.569 y las capitales de provincia siguen teniendo los índices de transmisión más altos. Chiclayo se ha consolidado como la ciudad con más casos: 14.333. No obstante, ello no ha generado reflexión en la ciudadanía, ya que se siguen incumpliendo las normas sanitarias.
Actualmente, Lambayeque se encuentra clasificada entre las regiones con nivel de riesgo muy alto, por lo que el horario de inamovilidad social empieza a regir desde las 8.00 p. m. hasta las 4.00 a. m. del día siguiente. Los aforos en toda clase de locales se redujeron drásticamente con el objetivo de evitar las aglomeraciones.
La Geresa comunicó que al sábado 20 de febrero el proceso de inoculación de los trabajadores de la primera línea se encuentra con un avance del 45.8 %, es decir, se ha logrado inmunizar a 3.433 personas de las 7.481 comprendidas en el padrón nominal del segundo lote de dosis de Sinopharm que arribó el último jueves.
Sin embargo, se debe resaltar que, según indicó el coordinador de Inmunizaciones de la Geresa, José Enríquez Salazar, hacen falta unas 5.000 dosis más para completar la vacunación de todo el personal activo en la primera línea.