A pocas horas de la Navidad aún hay personas que no han conseguido el regalo deseado y es por ello que siguen acudiendo a diferentes establecimientos para hacer sus adquisiciones.
En Mesa Redonda, a diferencia de otros días, esta vez se pudo notar menos afluencia de público. En los principales accesos se ubicaron fiscalizadores con dispositivos manuales para controlar el aforo máximo permitido, que es de 12.000 personas.
No obstante, en varias ocasiones se vio a niños y adultos mayores dentro del conglomerado a pesar que su ingreso está prohibido, según anunció días antes la Municipalidad de Lima.
Tal como registró un fotógrafo de La República, hubo menores de edad y personas de la tercera edad que tampoco llevaban bien puesta la mascarilla, lo que podría suponer un riesgo de contagio del nuevo coronavirus.
Varias personas indicaron que recién fueron hoy a realizar sus adquisiciones porque en los días previos estaban ocupados. Foto: Félix Contreras / La República
Varias personas indicaron que recién fueron hoy a realizar sus adquisiciones porque en los días previos estaban ocupados. Foto: Félix Contreras / La República
Esta situación fue reportada por otros medios de comunicación que entrevistaron a los padres de familia y estos indicaron que llevaban a sus hijos menores porque no tenían con quién dejarlos.
Asimismo, la mayoría de personas señalaron que fueron a comprar regalos para niños, como juguetes y ropa, y que acudieron recién hoy, 24 de diciembre, porque en los días previos estuvieron ocupados en el trabajo.
Una situación similar se vivió en centros comerciales de la capital. Un cliente que hacía cola para entrar a Plaza San Miguel confesó que se había olvidado de las compras para la cena navideña.
“Hemos comprado todos los juguetes y hoy nos acordamos que no hemos comprado nada para la cena. Estoy esperando para comprar verduras, carnes, vinos. Todas esas cosas”, dijo el hombre a América Noticias.