A los seis meses de haberse iniciado la emergencia sanitaria por la COVID-19 en la Región Piura, la Dirección Regional de Salud (Diresa) por fin anunció una ligera disminución de muertes por este virus en dicha localidad. Según dijo el director de la Diresa, Víctor Távara Córdoba, durante la última semana comprendida entre el 6 y 12 de septiembre, murieron 69 personas, es decir 20 personas menos que la semana previa.
El funcionario explicó que esa cifra es la más baja que reportó la Diresa en comparación a los meses de mayo y junio, donde se registró la muerte de 300 y 200 personas, respectivamente. “Hemos logrado estos resultados gracias al trabajo comunitario que venimos realizando y a las estrategias que se implementaron con los Comités comunitarios anticovid, los Equipos de Respuesta Rápida (EPP), y los puestos de control anticovid”, precisó el galeno.
El titular de la Diresa, además, dio a conocer que, en la semana 37, el personal de salud testeó a 5.936 personas, de las cuales el 31 %, es decir, 1,840 personas, resultaron positivas a la COVID-19. Explicó que, en el caso de los niños y niñas, de 107 evaluadas, el 35,5 %, es decir, 38 menores, dieron positivo a dicho virus. “Venimos trabajando en las campañas de concientización para que las personas entiendan y respeten los protocolos de seguridad dispuestos por el Gobierno. Solo de esa manera seguiremos disminuyendo los casos de COVID en nuestra región”, declaró.
El funcionario informó que las zonas donde se han registrado fallecidos durante la última semana son Chulucanas, Veintiséis de Octubre, La Unión, Querecotillo y Huancabamba.
Tras esta situación, el galeno anunció que la Diresa ha solicitado a la Dirección General de Insumos, Medicamentos y Drogas (Digemid) el permiso para instalar tres plantas de oxígeno en el hospital Santa Rosa, Sullana y Huancabamb para, de esa manera, brindar una mejor atención a los pacientes que son transferidos con dicho virus a cualquiera de estos nosocomios piuranos.