Arequipa tiene la planta de oxígeno medicinal más grande del sur peruano instalada en el hospital Carlos Alberto Seguín. Esta infraestructura fue importada de China. Puede producir hasta 60 metros cúbicos (m3) de oxígeno para los pacientes graves por COVID-19.
La compra del equipo fue posible gracias a la campaña Respira Perú organizada por la Conferencia Episcopal Peruana, la Sociedad Nacional de Industrias (SNI) y la Universidad San Ignacio de Loyola (USIL).
Una fuente contó a La República que la campaña nació de la indignación de Raúl Diez Canseco, fundador de la USIL. Todos los días eran las mismas escenas. Largas colas de peruanos a la espera de una ración de oxígeno. La gota que rebasó fue la muerte de dos bebés mellizos en Loreto por falta del suministro.
Diez Canseco consultó con Ricardo Márquez, presidente de la SNI si había un inventario de las plantas de oxígeno industrial paralizadas de algunas empresas para satisfacer esta necesidad.
En julio lanzaron la telemaratón “Respira Perú” para recaudar fondos y reparar los equipos. Reunieron 8 millones 253 mil soles. Varias empresas dieron su apoyo. Con lo recaudado, adquirieron cuatro plantas. La primera ya está en Arequipa y debe funcionar cuando usted termine de leer esta crónica.
Otras tres plantas serán para Huánuco, San Martín y una ciudad del norte aún por definir.
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Los impulsadores de Respira Perú eligieron a la Conferencia Episcopal Peruana como aliados para transparentar las donaciones.
El monseñor Javier Del Río Alba, Arzobispo de Arequipa, solicitó que se priorice a la Ciudad Blanca debido a la carencia de oxígeno y el aumento de infectados y muertos.
“La decisión se tomó en base a la opinión de un Comité Médico que asesora la campaña”, dijo. Se eligió el hospital Carlos Alberto Seguín Escobedo, dijo Del Río Alba, tras consultas con EsSalud y Ministerio de Salud (Minsa).
La Iglesia verificará la distribución del oxígeno y la recarga gratuita de balones para pacientes atendidos en casa. La prioridad es que se atienda también a hospitales y centros de salud de las provincias de Arequipa. Según la fuente de Respira Perú, si hay un excedente de oxígeno, este podría enviarse a Cusco y Puno.
Respira Perú tiene previsto instalar un centro comunitario de Oxigenación en el parque Selva Alegre. Del Río Alba detalló que este servirá para enfermos que no necesiten hospitalización, pero sí oxígeno y estar aislados por algunos días.
También se espera el arribo de 60 respiradores artificiales de un solo uso. La fuente de Respira Perú detalló que este tipo de ventiladores fabricados en Estados Unidos funcionan solo con la presión del oxígeno. No necesitan batería ni energía eléctrica. “Estos tipo de ventiladores lo usaban en las guerras, para los heridos en la batalla, se conectan al balón de oxígeno y funcionan con la presión. Así podemos salvar más vidas”, señaló.
En total adquirieron 2 mil de un solo uso, de los cuales 160 serán para el sur, 60 para Arequipa y los otros 100 serán distribuidos entre Puno, Cusco, Moquegua y Tacna.
Con el resto del dinero de la Telemaratón se arreglarán algunas plantas de oxígeno y procesar el medicinal. En el país se identificó 10 plantas desmontadas, una de ellas le pertenece a la empresa Southern.
“Esperanza en la Emergencia” es otra de las campañas de la Iglesia en Arequipa para población vulnerable. “Hemos distribuido víveres en dos oportunidades a un colectivo de personas transexuales y también a migrantes venezolanos”, señaló el arzobispo de Arequipa.
La Iglesia también distribuye almuerzos a adultos mayores en varios comedores. “También hemos provisto de alimentos a algunas albergues como la Casa de la Mujer, la Obra Social La Posada (para varones), asilos de ancianos, entre otros”, agrego del Río Alba.
Impulsaron la campaña “Protege a un Médico” en cooperación con la Coordinadora Regional por la Vida. Entregaron equipos de protección personal para el personal médico y sanitario de los hospitales Honorio Delgado y Goyeneche.
El arzobispo calcula que hasta la fecha se atendieron a más de cien mil personas.