Carencia de equipamiento médico mínimo indispensable en las áreas de consulta externa, urgencias y emergencias del puesto de salud del penal de Chachapoyas, región Amazonas, que genera el riesgo de una limitada e inadecuada atención a la población penitenciaria conformada por 809 internos, detectó la Contraloría General de la República.
De acuerdo a tres informes de control simultáneo (Informe de Visita de Control n.° 5744-2020-CG/GRAM-SVC, Informe de Visita de Control n.° 5758-2020-CG/GRAM-SVC e Informe de Visita de Control n.° 5765-2020-CG/GRAM-SVC), se identificaron 9 situaciones que afectarían la implementación de medidas de bioseguridad, gestión sanitaria y la gestión y manejo de residuos sólidos para la prevención y contención del COVID-19, en el mencionado penal.
Durante la visita realizada en el marco de la estrategia de control a la emergencia sanitaria, se evidenció que la farmacia del penal no cuenta con stock de medicamentos. Asimismo, se advirtió la carencia de balones de oxígeno medicinal.
De la misma manera, se advirtió que no cuenta con una ambulancia para trasladar a los internos que requieran atención médica de mayor complejidad, teniendo únicamente un vehículo que no está acondicionado para ese fin y que también se usa para diligencias administrativas.
Respecto a la implementación de medidas de bioseguridad, se constató la demora en la atención de los requerimientos solicitados por la responsable del área de salud penitenciaria frente al COVID-19, afectando las actividades del servicio de salud ante posibles contagios.
También se evidenció que el penal no cuenta servicio de agua potable permanente, contando solo de 40 a 60 minutos al día, lo cual no cubre la demanda del establecimiento penitenciario e impide la implementación de medidas de prevención y contención frente al coronavirus.
Por otro lado, en la gestión y manejo de los residuos sólidos, se detectó inadecuado almacenamiento y disposición final de residuos sólidos, al ser acopiados en bolsas sin sellar y sin rótulos que identifiquen su peligrosidad, así como, residuos biocontaminados enterrados o incinerados dentro del penal, lo cual genera el riesgo de transmisión de enfermedades infectocontagiosas.
El personal encargado del manejo de residuos sólidos tampoco cuenta con equipos de protección necesarios. Del mismo modo, el personal de salud manifestó que no han recibido capacitación en adecuada manipulación de residuos sólidos.