El Vicerrectorado Académico de la Universidad Andina del Cusco (UAC) aprobó un discriminatorio plan de adaptación de la “educación no presencial con carácter excepcional” en sus escuelas profesionales. Se trata de un plan para prevenir y controlar el COVID-19.
La universidad privada quiere salvar el semestre académico perjudicando a una gran cantidad de alumnos. Según la resolución, aquellos estudiantes que no tienen las condiciones suficientes y necesarias para poder continuar sus clases virtualmente tendrán que dejar el presente semestre académico.
“A ellos se les va a permitir retirarse del semestre otorgándoles una dispensa de estudios sin costo alguno y tramitada virtualmente. Del mismo modo, a aquellos estudiantes que decidieran dejar el semestre por cualquier otro motivo personal, ellos podrán volverse a matricular en el siguiente semestre para continuar sus estudios”, señala la resolución N.° 109, aprobada el 3 de abril pasado.
El plan de adaptación de la educación no presencial tendrá vigencia del 1 de abril hasta culminar todo el semestre académico.
Según la UAC, la medida se dicta en base a la disposición que la Sunedu autoriza “excepcionalmente a las universidades que así lo deseen, el iniciar con carácter temporal el aprendizaje a distancia, como parte del trabajo remoto, que se ha permitido en toda la nación”.
“La Universidad Andina del Cusco, en estas circunstancias, ha decidido virtualizar la segunda y tercera unidad de las asignaturas con el fin de garantizar la realización de su semestre 2020-1 y permitir a los estudiantes continuar con el proceso de enseñanza aprendizaje, pese a las condiciones existentes", dice la casa de estudios.