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Sociedad

Más de 100 proyectos mineros amenazan agricultura y salud en Piura

Concesiones. DREM otorgó autorizaciones para extraer oro y agregados en diversas provincias de la región. Actividades extractivas han sido rechazadas en más de una oportunidad en consulta popular.

larepublica.pe
Extracción. Dirigentes aseguran que trabajos de minería artesanal tienen el mismo potencial contaminante que otros proyectos.

Piura. La aprobación de más de 100 proyectos en el sector minero, metálicos y no metálicos, por parte de la Dirección Regional de Energía y Minas (DREM), podría causar la muerte de miles de hectáreas de cultivo y afectar severamente la salud pública de la población.

El extitular de la DREM, Percy Fiestas, aseguró que se trata de pequeñas concesiones de minería artesanal distribuidas en diferentes provincias de la región para la extracción de oro y agregados por parte de empresas formalizadas.

El exfuncionario manifestó que las concesiones, que incluye la explotación de minas de oro entre otros metales, compromete a los sectores de Suyo, Ayabaca, Huancabamba y Tambogrande. Mientras que en las concesiones no metálicas, donde extraen agregados, se encuentran las provincias de Sechura, Paita y Talara.

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“Son aproximadamente más de 100 proyectos que hay en Piura con la minería metálica y no metálica. Esta minería existe en varias partes de la región porque es pequeña y se establecen a cargo de la DREM”, expresó.

Percy Fiestas indicó que las autorizaciones otorgadas a las empresas formales son cuidadosamente revisadas para asegurarse que cumplan con el respectivo cuidado ambiental. Sin embargo, diversos dirigentes y autoridades han manifestado que los otorgamientos de las concesiones representan un peligro para la población y su actividad agrícola.

Advierten

Para el dirigente antiminero de la provincia de Ayabaca, Jaime Gonza, los proyectos concedidos por la Dirección Regional de Energía y Minas representan un grave peligro para las provincias altoandinas, debido a que amenazan la pureza de sus valles que usan el consumo humano y el riego de sus cultivos.

Aseveró que el gobierno regional ha concesionado el 64 % del territorio de Ayabaca para este tipo de actividades extractivas, mientras que en Pacaipampa, el 35 %. Asimismo advirtió que las pequeñas concesiones mineras tienen el mismo potencial contaminante que una empresa con proyectos de grandes magnitudes.

“Estos proyectos se ejecutan precisamente dentro del área donde se queda atrapada el agua, en nuestra cordillera de bosques, la cual al ser alterada podría perderse y no solo afectaría a nosotros en la parte alta, sino a los valles que se abastecen con suministro natural”, remarcó.

Por su parte el alcalde de Tambogrande, Alfredo Rengifo Navarrete, aseveró que las actividades extractivas que comprometen a su provincia tendrían una afectación directa en el sector agrícola. Sin embargo, precisó que estas autorizaciones deben ser revisadas para detectar que la zona donde se van a ejecutar no genere mayores prejuicios.

Conflictos

Parte de los conflictos latentes que se viven actualmente en la región responde al rechazo de la población de los proyectos mineros de mayor magnitud como Río Blanco en Ayabaca y El Algarrobo en Tambogrande.

El burgomaestre Rengifo informó que en Tambogrande el Gobierno Central viene impulsado, a través de Agencia de Promoción de la Inversión Privada (Proinversión), el proyecto minero El Algarrobo, pese a que ya existe una consulta popular que rechazó dichos trabajos, desde el año 2002.

Por otro lado, los dirigentes ronderiles han alertado a las autoridades por diversos enfrentamientos con la Policía y personal de la minera a cargo del proyecto Río Blanco. La población de ese sector ha sido enfática con su posición en rechazo a las actividades extractivas.

Cabe señalar que ambos proyectos corresponden a la mediana y gran minería, la cual es exclusiva del Ministerio de Energía y Minas, y del Instituto Geológico Minero y Metalúrgico (Ingemmet).