Luis Álvarez Guevara
El Concejo Municipal del distrito de Layo, en la provincia cusqueña de Canas, suspendió al regidor Santos Cañari Huayta por 60 días por ser infiel.
El último viernes, el pleno de regidores puso en debate la situación conyugal de uno de sus integrantes a petición de los representantes de la comunidad campesina de Taypitunga. El hecho privado y familiar se convirtió en un escándalo al comprobarse el adulterio de Cañari. Para las normas de conducta comunales, esto es considerado como un caso muy grave.
A Cañari Huayta, se le cuestionó su comportamiento ético-moral en la sesión de concejo, donde fue blanco de las críticas de los moradores de la comunidad y del distrito, así como de algunos de sus colegas.
La mayoría de concejales optaron por suspender a Cañari por un periodo de 60 días, que, según la petición, fue por falta ética (infidelidad), un hecho personal que no está estipulado en el Reglamento Interno de Concejo (RIC) ni en el marco legal de municipalidades.
Sin embargo, se procedió al debate y, en la votación, tres regidores votaron a favor de la suspensión y dos en contra. El resultado fue celebrado por los comuneros de Taypitunga.
De acuerdo al abogado municipal Jorge Sumari, no existe ley que establezca una sanción por un acto como la infidelidad. El alcalde del distrito, Aurelio Cáceres, y regidores podrían ser denunciados por abuso de autoridad colectiva.
No obstante, en la sesión de concejo, el referido concejal aceptó su responsabilidad y los cuestionamientos de sus vecinos. Manifestó la posibilidad de que, en un plazo de dos semanas, presente una reconsideración ante el pleno del concejo edil.
De otro lado, se informó que la decisión será remitida al Jurado Nacional de Elecciones (JNE), donde analizarán el caso atípico que se presentó en la localidad altoandina de Layo.