Lambayeque. Mercedes Vera, viuda de exdirigente de la empresa Tumán, declaró que empresario le ofreció trabajo para su hijo. Allegados de exdirectivo le habrían sugerido no denunciar a sospechoso de crimen.,En audiencia pública de prueba anticipada, la esposa del fallecido Manuel Rimarachín Cascos, Mercedes Vera Cajusol, declaró que el empresario Edwin Oviedo Picchotito se comunicó con su persona, en dos oportunidades, luego del asesinato del exdirigente de la empresa agroindustrial Tumán. Ayer en el despacho del juez Carlos Chanamé Chumán, del Octavo Juzgado de Investigación Preparatoria, Mercedes Vera respondió las preguntas que le hizo el fiscal Juan Carrasco Millones. A través de videoconferencia también participó el investigado Edwin Oviedo, quien afronta una prisión preventiva de 18 meses por ser presunto autor mediato de las muertes de Manuel Rimarachín y Percy Farro Witte, incluidas en el caso “Los Wachiturros de Tumán”. PUEDES VER Exburgomaestre de Íllimo afrontaría 15 investigaciones por presunta corrupción En su testimonio, Mercedes Vera señaló que en octubre de 2012, tras el asesinato de Manuel Rimarachín, se comunicó en una oportunidad con Edwin Oviedo a través del celular de la trabajadora del Grupo Oviedo, Ana María Yesquén. “(Edwin Oviedo) me dijo que no me preocupara, que el trabajo de mi hijo estaba seguro”, señaló en calidad de testigo. Seguidamente, el fiscal Carrasco le preguntó a Vera eficaz cómo confirmaba que la voz que escuchaba era de Edwin Oviedo y cuántas veces conversaron, respondiendo: “Como era dueño de (la empresa) Tumán, yo había escuchado su voz. En dos veces he conversado con él, cuando la señorita Ana María se fue a mi casa y me dijo que Edwin quería hablar conmigo. Entonces, yo hablé con él. La otra (conversación) fue en el Garza Hotel”. Posteriormente ella respondió sobre el motivo de esos diálogos. “En la primera (conversación) me dio el pésame. La segunda es cuando el señor Tito Ordinola y la señora Cecilia Limo dijeron que el trabajo para mi hijo era por tres meses, seis meses. Y nosotros no estábamos conformes. Fuimos a ver a la señorita Ana María y nos pasó (la llamada) con el señor Oviedo”. En esa línea precisó que Tito Ordinola y Cecilia Limo le dijeron que no debía hablar nada sobre la muerte de su esposo, a pesar de que este le confesó, antes de morir, que la persona conocida como Charún le había disparado. Clave Caso. El hijo del exdirigente, Paúl Rimarachín, también declaró que Oviedo se comunicó con él con el propósito de ofrecerle trabajo en la empresa Tumán. Incluso dijo que sus allegados le explicaron que debía desvincular a Oviedo del asesinato.