Fuerte golpe para Pedro Castillo. Desde el retorno a la democracia en el país, las solicitudes que emitían los presidentes de la República al Congreso para salir del país siempre fueron percibidas más como un trámite que como una real petición para viajar, dado que ningún Parlamento había negado antes a un jefe de Estado la posibilidad de salir del territorio nacional por alguna actividad oficial. Este jueves 4 de agosto, el Legislativo rompió con esa tradición y le denegó la autorización al mandatario para asistir a la toma de mando de Gustavo Petro en Colombia.
Aunque todos los mandatarios después Alberto Fujimori soportaron una oposición en el Parlamento, Alejandro Toledo, Alan García, Ollanta Humala, Pedro Pablo Kuczynski y Martín Vizcarra, jamás fueron impedidos de salir del territorio nacional. Con esta decisión del Pleno, el Gobierno de Pedro Castillo rompe un nuevo récord negativo en lo que respecta al ejercicio de la presidencia de la República. Hace solo unos meses se convirtió en el primer mandatario en funciones con una investigación preliminar abierta en el Ministerio Público.
Recientemente, en el mes de junio, el Congreso de la República autorizó el viaje de Pedro Castillo del 7 al 12 de junio a fin de que participe en la IX Cumbre de las Américas, en Los Ángeles, California, Estados Unidos. En mayo, el Pleno aprobó su viaje a la ciudad de Davos, Suiza, para participar en la Asamblea Anual del Foro Económico Mundial (WEF).
Este jueves 4 de agosto, el Pleno no autorizó la salida del país del presidente de la República, Pedro Castillo, quien tenía previsto viajar a Colombia del 6 al 8 de agosto. Con 42 votos a favor, 67 en contra y cinco abstenciones, la representación nacional le negó el permiso al mandatario para que asista a la toma de mando del presidente electo colombiano, Gustavo Petro.
Los parlamentarios de las bancadas de Fuerza Popular, Acción Popular, Alianza para el Progreso, Avanza País, Renovación Popular y Somos Perú votaron en contra de que el mandatario asista al evento internacional. Entre sus argumentos indicaron que el principal impedimento son las cinco investigaciones abiertas que tiene el jefe de Estado en la Fiscalía de la Nación.