El primer ministro Guido Bellido, llegó ayer hasta el sector conocido como la “Y”, parte alta del distrito de Llallimayo (Melgar) y Ocuviri (Lampa), al norte de la ciudad de Puno.
En el punto confluyen dos ríos. Por uno de los afluentes discurre agua transparente y por el otro turbias y ácidas que son evacuadas del interior de la mina Arasi. Esta empresa explotaba oro en el distrito de Ocuviri. Cerró sus operaciones pero del interior se continúan evacuando lixiviados al medio ambiente.
Bellido dijo que se sentía triste al ver la magnitud de la contaminación. Por ello se comprometió ante cientos de comuneros a declarar en emergencia la cuenca de Llallimayo, por donde discurren relaves de la minera hace más de diez años.
Guido Bellido declaró a la prensa tras recibir la primera dosis de Sinopharm contra la COVID-19 en el inicio de la vacunatón. Foto: PCM
El premier dijo que esta realidad obliga una nueva ley de minería. Consideró que en adelante, las futuras consultas previas no solo deberían aplicarse en los pueblos ubicados dentro del área de influencia de la mina, sino en todas las zonas que pudieran verse afectadas.
Bellido cuestionó a los funcionarios del Estado que sabían del problema pero que no tomaron medidas al respecto. “Como (ellos) no toman esa agua, por eso no hacen nada”, dijo el premier desde un estrado que se instaló al costado del río Llallimayo. “Cómo han podido aguantar tanto tiempo con esta contaminación”, preguntó Bellido a los comuneros.
Ante ello anunció que no habrá más mesas de diálogo. El gobierno, ahora, construirá una planta de aguas ácidas para remediar los impactos en los ríos de la zona.
De otro lado, Bellido dijo que hay suficientes razones para dudar sobre los estudios realizados por el Estado, sobre los niveles de contaminación de dicha cuenca.
Explicó que las empresas mineras contratan a personajes claves del aparato público para tenerlos de su lado cuando salen de la función pública.
En la visita de Bellido a Puno, estuvo acompañado por los congresistas Carlos Zevallos, Oscar Zea, Wilson Rusbel Quispe y Flavio Cruz, además de funcionarios de gobierno.
Bellido, dijo que el gobierno regional de Puno se encargará de ejecutar el estudio de los proyectos de remediación.
El premier Guido Bellido, también se trasladó al distrito de Asillo, en la provincia de Azángaro. Allí también se comprometió a ejecutar medidas para frenar la contaminación de dicho afluente afectado por relaves mineros que bajan desde el distrito de Ananea, en la provincia de San Antonio de Putina.
Guido Bellido