La exministra de Relaciones Exteriores Elizabeth Astete dio sus descargos ante la Comisión Permanente sobre el caso Vacunagate, en el que se investiga su inoculación irregular. En este sentido, la excanciller dijo que estaba “convencida” de que el procedimiento para su inmunización era regular.
“Asistí a la Universidad Cayetano Heredia convencida de que se trataba de una actividad regular (…) Convencida de la regularidad del proceso, el día 21 de enero, al término de una reunión en Palacio, informé al presidente Sagasti y a la ministra Mazzetti las razones por las que tenía pensando vacunarme, a lo que el presidente asintió luego de escucharme atentamente”, manifestó.
Astete reconoció, además, que cometió “un grave error de criterio”, pues creyó que la vacuna que se le ofrecía se trataba de una diligencia regular, por lo que añadió que se haría responsable de sus actos.
“Asumo plenamente las consecuencias del error que cometí al vacunarme, y de no haber investigado y analizado de manera profunda y oportuna el tema”, sostuvo.
Sin embargo, acotó: “Rechazo categóricamente las imputaciones que se me hacen de haber aprovechado mi cargo para solicitar la inoculación de la vacuna y de haber otorgado algún beneficio a Sinopharm o a cualquier otro laboratorio”.
En esa línea, afirmó que su inmunización “no tuvo nada que ver” con el proceso de negociación para la adquisición de las vacunas, y tampoco buscó obtener algún tipo de beneficio para la farmacéutica en mención.
“Es importante que sepan que los tres meses y dos semanas que estuve al frente de la cancillería no tuve conocimiento de las gestiones realizadas durante el Gobierno del expresidente Vizcarra para la obtención del lote de las llamadas vacunas de cortesía”, sentenció.
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