Premier, el fiscal, José Domingo Pérez dijo que lo que ha ocurrido con Reactiva Perú es un “escándalo”, luego de conocerse hacia dónde fueron derivados parte de los préstamos respaldados por el Estado. ¿Ustedes en el gobierno reconocen alguna responsabilidad política en este tema?
Mire, cuando se decidió por Reactiva Perú a través de un decreto legislativo sujeto a los controles del Parlamento, se pensó en una reactivación económica y, en esa misma norma, se establecieron unos requisitos que tenían que ser asumidos por el sistema financiero que es, finalmente, el que otorga los créditos, no nosotros. No trato de eludir una responsabilidad, sino (me refiero) a la buena fe con la que impulsó este programa el gobierno.
Para entenderlo bien: ¿Ustedes tuvieron buena fe en los bancos y estos no actuaron en concordancia con esa buena fe que depositaron en ellos?
Efectivamente. Nuestra primera preocupación era que no se rompiera la cadena de pagos, evitar que haya una afectación a los derechos de los trabajadores, sobre todo en las remuneraciones pendientes, y por eso establecimos requisitos mínimos: que no se tenga deudas tributarias mayores a una UIT, que (los que quisieran acogerse) no estuvieran calificados en el sistema financiero con problemas potenciales. Ahora, esto pasa por el filtro de Cofide y finalmente es el sistema financiero el que otorga. Como gobierno central nos comprometimos a reactivar la economía.
¿Le van a pedir explicaciones a los bancos por sus decisiones? Finalmente, la traición a la buena fe que ustedes depositaron en ellos, por lo que me ha dicho, pone en entredicho la política de gobierno que ustedes implementaron.
Y es más, está sujeto a contradicciones de orden social, que son legítimas. A través del Ministerio de Economía y Finanzas se está pidiendo explicaciones al sistema financiero y a Cofide, porque sería inconcebible que se encuentre créditos que hayan sido otorgados para pagar otros créditos obviamente a tasas más elevadas, o que se encuentren créditos cruzados, es decir, que parten de un grupo económico y se cruzan con otro grupo económico, se sabe que son cuatro bancos fuertes en el país, ¿no? En el artículo del decreto legislativo se establece -claramente- que las empresas que se acojan no pueden usar el dinero para pagar obligaciones financieras previas. Por eso, la información tenemos que revisarla y se ha pedido toda, como corresponde.
¿Pagar despidos sería un uso legítimo del dinero de Reactiva Perú?
Lo primero es transparentar los recursos, que hayan sido otorgados dentro del marco legal y que no se hayan direccionado por un favoritismo predeterminado. Y más aún, si es que hubiera algún hecho grave de corrupción, sería lamentable.
Insisto, ¿pagar despidos sería un buen uso de ese dinero, de acuerdo con los criterios que ustedes establecieron?
No, no, no, no, no, no. De ninguna manera. Esta norma no estaba para impulsar, auspiciar o pagar despidos, de ninguna manera. Era para no romper la cadena de pagos y, segundo, pagar remuneraciones pendientes. Se trataba de ayudar a la economía de los trabajadores.
Le pongo un caso puntual que se ha difundido. Ojo Público reveló que la clínica San Pablo recibió 10 millones de soles de Reactiva Perú. La hermana de un paciente contagiado de Covid-19 denunció que esa entidad quiere cobrar casi medio millón de soles por el tratamiento. ¿Qué me dice de eso?
Mire, esta es una situación de crisis en la que está involucrado no solo el gobierno sino el país en su conjunto, y lamentablemente hay miserias humanas contrarias a un espíritu solidario y comprometido con el país, como el caso que usted menciona. En una situación así, ¿puede una clínica aprovecharse?
¿Qué van a hacer para que la segunda fase de Reactiva Perú no presente los mismos problemas?
Definitivamente eso está en revisión. Se han flexibilizado los techos, porque una de las observaciones era que no se llegaba a las medianas y pequeñas empresas. Además, se han incluido a más participantes del sistema financiero. Sin embargo, si esto es insuficiente y se necesita un marco regulatorio, lo haremos.
Insisto con esto: ¿reconocen responsabilidad política en el gobierno?
¿Responsabilidad política por una medida extrema para impulsar la economía? En todo momento ha habido transparencia y buena fe. Lamentablemente es un proceso donde participan distintos actores. Nosotros lo hacemos como garantes. Es el Banco Central de Reserva el que licita, Cofide el que interviene y es el sistema financiero el que otorga los créditos.
No me queda muy clara la respuesta. ¿Asumen o no responsabilidad por los errores detectados?
Es que responsabilidad política es una expresión bastante fuerte. Lo que sí le enfatizo es que ha habido una clara y comprometida intención del gobierno con la reactivación económica.
Vicente Zeballos
PUEDES VER Conoce el motivo del nombre oficial del 2020 en Perú: “Año de la universalización de la salud”
Se supo también que empresas ligadas con grupos empresariales fuertes de este país recibieron dinero de Reactiva Perú y aplicaron suspensiones perfectas. ¿Le parece que el Ministerio de Trabajo tiene un buen desempeño?
Gran parte de las empresas que han intentado acogerse a la suspensión perfecta no han podido por deficiencias en las propuestas puestas a consideración del ministerio. Pero la pregunta tiene otro contexto: por un lado, el Estado otorga créditos indirectos, y sin embargo estas empresas acuden a la suspensión perfecta. ¿Es una contradicción? Por supuesto. Si por un lado alentamos la economía, el pago de las remuneraciones, por el otro no se puede despedir a los trabajadores.
¿Y qué se puede hacer frente a eso? ¿Ya nada, no?
Estamos en pleno proceso del marco normativo, no olvide que estamos en un periodo de excepcionalidad…
Eso lo entiendo.
Por eso, y estas normas no vienen de diez años atrás, sino que estamos respondiendo a una contingencia.
La doctora Pilar Mazzetti dijo en una entrevista pasada que ella acusaría de traición a la patria a los que especulan con medicamentos y mascarillas, a las clínicas que actúan mal, a los que venden el oxígeno a precios exorbitantes. ¿Está de acuerdo?
Definitivamente. ¿Quién podría estar en desacuerdo con eso? Sobre todo cuando compartimos una emergencia y hay un aprovechamiento que se convierte en un acto delincuencial.
PUEDES VER Cobró S/ 133.000 al Estado sin tener grado profesional y sería cercano al presidente Vizcarra
Ahora bien, he leído comentarios en redes que critican el papel que ha tenido el gobierno frente a estas malas prácticas. Le voy a leer uno que resume un poco el sentimiento de mucha gente: “No se atrevieron a meterse con clínicas ni supercadenas de farmacias. Ni con distribuidoras de medicamentos que condicionaban venta de medicinas a boticas y farmacias independientes. Ni con los bancos, AFPs, aseguradoras. Nada. Un Estado encogido”. ¿Qué responde?
Mire, habría que ubicarnos en la oportunidad. Si esa pregunta me la planteaba hace seis meses, la respuesta hubiera sido diferente. Sin embargo, en el contexto en el que estamos tenemos que ser disciplinados y ordenados, sobre todo en el manejo económico. Hay dos prioridades: la salud y la economía. Claro que comparto un punto de vista al respecto, pero la situación demanda mucha disciplina y equilibrio en las decisiones.
Miles de peruanos no han podido recibir el subsidio para enfrentar estos meses durísimos y los que vendrán, con la caída brutal de la economía y los cientos de miles de desempleados. ¿Se contempla la posibilidad de un bono universal, considerando el DNI, por ejemplo?
Estamos avanzando dentro del gobierno con una propuesta bastante importante y oportuna para que los peruanos, con su DNI, puedan tener una cuenta bancaria. En paralelo, el Congreso está trabajando en lo mismo. Es cierto, no hemos terminado de pagar los 4 subsidios o bonos, y no es que no haya habido voluntad, porque están los recursos pero el formato de Estado que tenemos no ayuda, no tenemos un mecanismo que nos permita llegar a cada uno. Por ejemplo, encontramos padrones con deficiencias en traslados domiciliarios, o con personas fallecidas. Sobre su pregunta, no se descarta esa posibilidad. Estamos evaluando todas las posibilidades que signifique atender todas las demandas sociales de las familias.
Vicente Zeballos
Entonces, ¿una posibilidad es el bono universal?
Sí. Es una posibilidad en permanente evaluación. Pero hay otros frentes. Ya se aprobó el decreto de las canastas alimentarias, que implica algo de 80 millones de soles, para ser distribuidas a unas 200 mil familias focalizadas en Lima. Y se han abierto los comedores populares. Y lo último es Arranca Perú.
¿Pero lo del bono universal es una posibilidad real, concreta, o me lo dice para salir del paso?
En una situación tan delicada no cuentan los gestos sino la decisión política. Se está evaluando con la seriedad del caso.
Pasemos a la estrategia sanitaria. ¿El Perú está apostando por la inmunidad de rebaño, sin decirlo?
No, no estamos en eso. El ministro de Salud lo ha dicho, que estamos en un decrecimiento que genera algún nivel de entusiasmo, pero no es una perspectiva clara. En algunas regiones disminuye y en otras viene desarrollándose, lo que responde a la complejidad del país. Estamos observando de manera permanente. No hemos salido aún.
No obstante, hay mucha más gente afuera y la vigilancia ha disminuido.
Antes casi todo estuvo cerrado. Luego, empezando mayo, anunciamos el plan de reanudación de actividades económico-productivas y hablamos de una gradualidad. La mayor movilización es producto de un plan planificado y advertido. Estamos ya en la segunda fase y con la tercera, que es en julio, se va a sentir algo más de gente en las calles. Igual, seguimos con el toque de queda, la inmovilización de los domingos, la restricción en las salidas, el tope del 40% del trabajo presencial en la administración pública.
¿Ganó el lobby con la decisión de abrir los centros comerciales a partir del lunes?
No. Yo no sé de dónde viene eso. Lo de “lobby” es una expresión bastante fuerte, como si un conjunto de intereses nos hubiera obligado a abrir los centros comerciales. Lo que ha habido es un plan trabajado y articulado por distintos ministerios.
Con sinceridad, ¿usted va a ir a un centro comercial a comprar con su familia?
Es que eso no está permitido, en principio. Solo se permite que vaya una sola persona.
Reformulo, ¿usted va ir a comprar?
Si las circunstancias me lo exigen, tendría que ir a comprar. Pero no es mi caso. Todos los centros comerciales tienen que cumplir los protocolos de salubridad.
PUEDES VER Zeballos contradice a ministro de Defensa y dice que pases vehiculares vencen recién el 30 de junio
¿No va a ir entonces?
No puedo ponerme en una situación subjetiva.
La presidenta de la Confiep, María Isabel León, pidió que ya se reactiven todos los sectores que puedan cumplir los protocolos. Llamó la atención su invocación a que los peruanos contribuyan cuidándose a sí mismos, es decir, a cuidarse solos. ¿Está de acuerdo?
No, no. Si fuera esa la disyuntiva, la pregunta sería, ¿y para qué está el Estado? El Estado es el que impone el orden y, a su vez, vela por la salud. Acá no tiene que primar lo económico sobre la salud, no. Es una premisa impertinente. Respeto la opinión, obviamente, pero es un comentario personal.
Hablemos del Estado, entonces. Ahora que lo ha visto en una circunstancia extrema como esta, ¿cómo evaluaría su desempeño?
Comparto esta premisa: hemos crecido, pero no hemos desarrollado. Y mire a nuestro sistema de salud. Hace menos de un año, cuando una persona iba a un hospital, y le daban una cita para dentro de cinco meses, nadie decía nada. Hace un año, nuestro sistema de salud ya estaba colapsado y lo asumimos y lo convalidamos. Hoy tenemos que dar un vuelco total a esa percepción que asumíamos como natural. Las prioridades han cambiado, el Estado debe cambiar y por eso se necesita una reforma. Siempre se hablaba del 6% del PBI para educación, pero nunca se hablaba de lo mismo para la salud. Y también hay que hablar de inclusión financiera.
¿Cómo definiría al Estado peruano?
Hemos estado compartiendo una idea de modernidad, pero cuando hemos vuelto a la realidad hemos encontrado múltiples y complejas debilidades y falencias.
Una falencia tiene que ver con la respuesta a favor de las comunidades nativas. ¿Por qué el MEF todavía no ha desembolsado el dinero para su atención?
Justamente en la mañana de hoy (jueves) tuvimos una reunión con el MEF y el ministro de Salud. Pasó lo de siempre: una circunstancia burocrática-administrativa entrampó el tema. Esta es, pues, parte de la problemática del Estado que tenemos, y ante una emergencia se pone en evidencia.
¿Cuándo se va a desembolsar el dinero?
Cuanto antes. La observación ya fue superada. El desembolso debe darse en los próximos días.
Vayamos al Congreso. Usted fue parte del grupo de congresistas que impulsó la reforma universitaria. Se aprecia una fuerte arremetida contra la Sunedu desde la Comisión de Educación. ¿Cree que hay intereses particulares en ese grupo?
Definitivamente. Creíamos que la Sunedu y el cambio en la política universitaria era sostenible e irrebatible e irrevisable. En el anterior Congreso se quisieron hacer modificaciones que no prosperaron. Y la ciudadanía entendió el cierre de algunas universidades como una medida no solo legal sino legítima. El asunto estaba consolidado. Pero ahora todo se remueve, tratando de meter por la ventana un texto adicional para facilitar la regularización de universidades con licencias denegadas. Esto pone en evidencia que aún hay intereses oscuros, incluido el Congreso de la República, que trata de enviar botes salvavidas a estas universidades que no demostraron calidad ni seriedad.
¿Y qué van a hacer desde el Ejecutivo para defender la reforma?
Es que, justamente, el debate inicia porque solicitamos una prórroga de la moratoria (para crear nuevas universidades). Era algo muy concreto, pero esto fue utilizado para petardear todo el sistema universitario que tenemos a la fecha. Como gobierno, con el ministro de Educación, estamos muy pendientes y haciendo un seguimiento de la Comisión de Educación para que esto no pueda prosperar.
No sé cómo podrían detener al Congreso. Bancada no tienen. Un poco complicado, ¿no?
Mire, tampoco tuvimos bancada antes, usted lo recordará. Sin embargo, la opinión pública jugó un rol muy importante, y hoy también. La presión ciudadana forzó a que el presidente de la Comisión de Educación desista del texto que proponía al inicio.
Yo sé que ustedes han dicho que las elecciones de abril de 2021 van de todas maneras, sin embargo tengo una duda: ¿cómo se realizarán si es que no hay una vacuna aún e implican la movilización obligatoria de millones de personas para votar?
Alguien podría decir que es muy aventurado predecir si habrá o no vacuna. Más allá de eso, las elecciones tienen que darse, es una responsabilidad política del gobierno y el presidente Vizcarra la ha reiterado: no tiene por qué ponerse en riesgo la institucionalidad democrática del país. Ahora, mirando hacia las elecciones, habrá que establecer reglas sociales para un mejor ordenamiento de la participación en el acto electoral, incluso en las campañas. Se tendrán que dar normas específicas e innovadoras, las circunstancias así lo están exigiendo.
Tendremos que votar en varios días, entonces, para no salir todos al mismo tiempo.
Alguna de esas alternativas tenemos que adoptar. Pero pensar que se deben suspender (las elecciones) o extender los plazos, no. Eso podría generar inestabilidad política y social.
Hablando de plazos: extender la cuarentena ya es algo descartado, ¿verdad?
Esta es una enfermedad muy dinámica, complicada. No se sabe cuándo habrá vacuna. ¿Cree usted que podemos determinar tiempos con certeza? No. Hemos recogido conceptos por aquí, por allá, y todo está en permanente evaluación. Todas las decisiones se sostienen en los criterios médicos y científicos del equipo que acompaña al ministro Víctor Zamora.
¿Qué espera que ocurra con el Perú una vez se supere la emergencia?
Yo espero un país diferente, pero con un Estado también diferente y más eficiente. Superado el virus, la primera tarea es a seguir una reformulación integral de lo que tenemos como infraestructura estatal. Este Estado no puede ser el mismo. No sé si el concepto sea el más apropiado: como gobierno tenemos el mejor entusiasmo y disposición para atender, sin embargo esta forma de Estado no lo permite. Disposición para pagar los bonos, los subsidios, existe. Está el dinero. ¿Podemos llegar a esas seis millones y medio de familias? Eso tiene que cambiar. En el fondo, esta es una oportunidad histórica para darle un giro a nuestras prioridades.
¿El Perú está ganando o perdiendo la batalla contra la pandemia? ¿O estamos en tablas?
Estamos en observación, en permanente observación. Y esto responde a la complejidad del país, valgan verdades. ¿Tenemos un mal sistema de salud? No, no es malo. Es pésimo.
Suscríbete aquí al boletín Política La República y recibe a diario en tu correo electrónico las noticias más destacas de los temas que marcan la agenda nacional.