La audiencia por el caso César Villanueva a cargo del juez supremo de Investigación Preparatoria, Hugo Núñez Julca, trajo como novedad la aparición de una nueva infiltrada en el Equipo Lava Jato. Se trata de Deily Arlene Pereda Rodríguez, asistente de función fiscal del equipo que está bajo el mando de la fiscal Geovana Mori, aunque inicialmente se dijo que era asistente de Germán Juárez Atoche.
Así lo reveló ayer la fiscal suprema Bersabeth Revilla Corrales, quien explicó que durante el allanamiento en la casa de Alberto Rossel Obando (hijo del fiscal Alberto Rossel Alvarado y abogado de Villanueva) se verificó que este había recibido mensajes del celular de Pereda Rodríguez.
“En el allanamiento a Rossel Obando su celular se encendió, notándose en la barra de notificación que le llegó un mensaje de whatsapp de ‘Deicy PUCP’, pero el mensaje fue eliminado, por lo que se tomó foto de la pantalla del celular”, precisó.
Luego sostuvo que identificaron que el mensaje era de Deily Pereda y con eso acreditan que la asistente del Equipo Especial Lava Jato tiene vínculos con el hijo del fiscal Rossel, abogado recién egresado y con un año de experiencia, que fue contratado por Villanueva.
Posteriormente, se supo que Pereda Rodríguez en realidad es asistente del Segundo Despacho del Equipo Especial a cargo de la fiscal provincial Geovana Mori, quien informó al fiscal superior Rafael Vela, coordinador del Equipo Especial de Fiscales, mediante oficio 140-2019, que Deily fue puesta a disposición de la Oficina General de Potencial Humano para que se puedan realizar las diligencias pertinentes.
El sindicado anteriormente como infiltrado de Villanueva en el equipo Lava Jato es Alexander Taboada, entonces fiscal adjunto del equipo del fiscal Germán Juárez. Taboada fue separado del grupo de fiscales por disposición del coordinador Rafael Vela, luego de que se conociera que tuvo contactos y se reunió con el fiscal adjunto Ronald Chafloque.
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Justamente, la defensa de Chafloque aceptó que su patrocinado fue el nexo entre Alexander Taboada y Alberto Rossel, tal y como está comprobado en las interceptaciones telefónicas, aunque negó que eso implique tráfico de influencias. Chafloque se acogió a la confesión sincera y detalló los contactos que realizó a favor de César Villanueva.
A decir de la fiscal Revilla, la causa de que el expremier intente la infiltración al Equipo Lava Jato es estar al tanto de la investigación en su contra por, presuntamente, recibir coimas de la empresa brasileña Odebrecht.
Anotó que la infiltración habría dado resultado y que fue por esto que el Equipo Especial abrió investigación a Villanueva a un plazo de 36 meses sin solicitar ninguna medida de restricción. La fiscalía recién ha pedido la prisión preventiva para Villanueva. Ese pedido será analizado hoy por el juez Jorge Chávez Tamariz.
Tras escuchar a la fiscal Revilla y a los abogados, el juez Hugo Núñez anunció que hoy, viernes, dará a conocer su decisión. La fiscal pidió comparecencia con restricción de impedimento de salida del país para César Villanueva y el empresario José María Santisteban por los delitos de tráfico de influencias y de patrocinio ilegal. Además, prisión preventiva por 18 meses para los exfiscales Alberto Rossel y Ronald Chafloque.
En la fundamentación del pedido de prisión preventiva para el fiscal Rossel, Revilla sostuvo que cometió interferencia a la justicia al tratar de negar los hechos, y que tiene poder para influir en la administración de justicia.
Agregó que está acreditado que utilizó a su hijo Alberto Rossel Obando para hacer las veces de abogado de Villanueva e incluso hizo escritos a favor del ex primer ministro. La defensa de César Villanueva dijo que se allanaba al pedido de comparencia, pero se mostró en desacuerdo con la caución de 100,000 soles.
Rossel y Chafloque negaron haber cometido tráfico de influencias y rechazaron que se les imponga prisión preventiva, mientras se les investiga.
En la audiencia, el juez Hugo Núñez llamó la atención al fiscal Rossel debido a que no atendía la sesión y conversaba con otra persona. “Usted no debe conversar en audiencia. Señor, cállese la boca, escúcheme. A usted yo lo veo conversando, es una falta de consideración”, señaló.
La fiscal Revilla sostuvo que cuando detuvieron a César Villanueva y a los fiscales, estos celebraban que las influencias en el despacho del fiscal Germán Juárez dieron resultados.