Esta semana que viene es clave para el Ejecutivo y su intención de que las elecciones generales se adelanten para abril del 2020. Ayer se conoció que habría habido una reunión entre miembros del Gobierno para terminar de definir una estrategia. Hay varios frentes abiertos en estos momentos, lo que complica -bastante- el escenario: el lunes, la delegación de la Comisión de Venecia empezará su visita oficial para recoger información a fin de elaborar su informe; el lunes 30 -de no mediar una renuncia en bloque- el Congreso dominado por la mayoría fujimorista y sus aliados elegirá a los nuevos miembros del Tribunal Constitucional, con la evidente intención de copar dicha institución; y la Comisión de Constitución seguirá alargando el debate del proyecto de reforma constitucional hasta donde pueda.
Como este diario ya ha informado, una de las opciones que se maneja desde el Gobierno -y que no se ha descartado en ningún momento- es la presentación de una nueva cuestión de confianza.
Palacio, a través de diversos voceros, incluido el presidente de la República, Martín Vizcarra, le ha pedido al Poder Legislativo que el debate avance a buen ritmo, para que se pueda adoptar una decisión a finales de este mes. Hay que tener en cuenta que el cronograma electoral es apretado y se ha previsto un referéndum en diciembre que confirme la reforma para que pueda haber elecciones presidenciales y legislativas el tercer domingo de abril.
Mientras tanto, son dos los escenarios que se manejan en el Parlamento sobre el proyecto de adelanto de elecciones. El primero supone tomar una decisión a finales de este mes. El otro implica esperar el pronunciamiento de la delegación de la Comisión de Venecia.
En ambos casos, el desenlace sería el mismo: la iniciativa no obtendría los votos necesarios en la Comisión de Constitución para ser debatida luego en el Pleno. En realidad, en estos momentos, nadie en el Congreso sostiene que la iniciativa del Gobierno tenga alguna chance de ser aprobada.
Por eso es que la cuestión de confianza aparece como -acaso la única opción constitucional para presionar al Legislativo. Debe recordarse que si se presentara y esta resultara negada, Vizcarra tendría la opción constitucional de disolver el Congreso. Aunque también se ha filtrado que no hay consenso en el gabinete sobre la conveniencia de dar o no ese paso.
- Este domingo se tiene previsto que llegue la delegación de la Comisión de Venecia. Sus miembros están invitados a una sesión extraordinaria de la Comisión de Constitución, que se realizará el lunes en el Palacio Legislativo.
- No será la única cita. La delegación también sostendrá conversaciones con representantes del Gobierno y con expertos locales. Su opinión -no vinculante- se conocerá entre el 11 y 12 de octubre.