Hace 27 años cayó Abimael Guzmán. El Grupo Especial de Inteligencia (Gein) había capturado el 12 de septiembre de 1992 al líder de Sendero Luminoso cuando se encontraba con la cúpula terrorista. Para el ministro del Interior, Carlos Morán, significó una “estocada al corazón” de la organización que causó un grave daño al país.
En diálogo con la agencia Andina, Morán Soto sostuvo que se trató de un descabezamiento de Sendero Luminoso, por lo que la organización terrorista entró en un “declive operacional”.
“La captura de Abimael Guzmán representó una inflexión en la lucha contra el terrorismo, porque por primera vez en el mundo era capturado el cabecilla de una organización terrorista vigente, junto a su cúpula dirigencial”, señaló Carlos Morán. “Prácticamente fue una estocada al corazón de la organización terrorista”, añadió.
Para el ministro del Interior –quien formó parte del Gein–, la captura de Abimael Guzmán, como parte de la Operación Victoria, sucedió en el “mejor momento en que, según ellos, estaban desarrollando sus acciones contra el país”. Consideró que este logro “significó que, a partir de esa fecha, progresivamente, la organización terrorista entró en un declive operacional”.
El ministro también expresó que todas las decisiones en Sendero Luminoso pasaban por Abimael Guzmán.
“Era él quien personificaba a toda la organización partidaria, el culto a la personalidad era muy fuerte en Sendero Luminoso y encarcelar al ‘pensamiento Gonzalo’ significó que los demás, el resto de la organización, perdieran el rumbo y el direccionamiento”, señaló Carlos Morán.