La detención del expresidente de la República Alejandro Toledo por parte de la justicia estadounidense no signifca que será extraditado en los próximos días.
Tras el arresto de Toledo Manrique, se seguirá un proceso que podría demorar hasta un año.
De acuerdo a un informe realizado por el estudio de abogados Estudio Foley Hoag LLP, encargados de representar a la defensa peruana en el caso, el proceso de pedido de extradición del exmandatario se ha dividido en 7 etapas. Actualmente, nos encontramos en la número 5.
En la presenta fase, luego de haber sido detenido, Alejandro Toledo Manrique podría pedir el pago de una fianza y de esa forma conseguir ver en libertad su caso. No obstante, para que la justicia estadounidense lo permita, la defensa del exlíder de Perú Posible deberá argumentar que su cliente presenta graves problemas de salud o que existe una atípica demora en el proceso de extradición.
Vale recordar que el promotor de La Marcha de los 4 suyos tiene 73 años, pero no se ha reportado que tenga un problema médico complejo.
Por otro lado, la corte analizará si podría fugarse el acusado en caso se le otorgue el beneficio en mención.
Tras ello, Alejandro Toledo podría presentar un hábeas corpus. El ministro de Justicia, Vicente Zeballos, explicó que ello podría causar que el caso se prolongue por más de 6 meses.
Después, en el supuesto de que no validen su requerimiento, la corte podría aceptar la extradición. Si sucede ello, la Oficina de Aplicación de la Ley e Inteligencia de Estados Unidos evaluará la documentción presentada por las partes implicadas.
Posteriormente, dicha oficina mandará el pedido de extradición a los asesores jurídicos del Secretario de Estado y un memorándum al propio funcionario pidiendo la extradición. Si el Secretario de Estado accede a la solicitud, ordenarán al alguacil encargado de la custodia de Toledo Manrique que lo entreguen a los autoridades del Perú.