En los últimos días, se ha difundido en El Salvador una nueva medida adoptada por el presidente Nayib Bukele para combatir la delincuencia. El Plan Cero Ocio es una iniciativa que implica que los presos que han sido condenados por delitos menores sean asignados a diversas tareas, como limpiar las calles del país bajo supervisión, y se les permita salir de sus centros de reclusión por unas pocas horas.
A pesar de que la medida fue oficializada a mediados del año 2021, las imágenes de los presos realizando trabajos en beneficio de la sociedad han surgido en medio de la polémica decisión de su gobernante para combatir el aumento de las pandillas. Esta medida incluyó la inauguración del Centro de Confinamiento del Terrorismo en febrero.
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Los más de 2.000 prisioneros de la Fase de Confianza deben dedicarse a la limpieza de las calles y las playas. Asimismo, tienen que reparar los colegios, hospitales públicos, la infraestructura policial, así como la contrucción de viviendas para las personas de bajos ingresos económicos. Por último, los reos deben confeccionar los uniformes de los jóvenes que integran una academia sociodeportiva de fútbol en cada municipio de El Salvador.