La lluvia que cayó sobre Puerto Príncipe causó escenas de pánico entre la población que habita bajo carpas improvisadas desde el pasado 12 de enero, cuando un terremoto sacudió a la capital haitiana. Las escenas de nerviosismo pudieron comprobarse en lugares como Champ de Mars, Petion Ville y varias zonas de la ciudad, donde la gente comenzó a huir en todas las direcciones en busca de un lugar para guarecerse de la lluvia, en muchos casos bajo techos frágiles. Las lluvias motivaron protestas espontáneas de los haitianos cerca de Champ de Mars, quienes reclamaron carpas que ofrezcan protección a la población. "Es el Estado el que debe de ocuparse de nosotros", dijeron algunas de las personas que participaron en la protesta, mientras otras aseguraron no tener "nada, ni siquiera un plástico para poner en el suelo". Algunos manifestantes se quejaron de la especulación en torno a la venta de los plásticos utilizados como protección y consideraron que su precio es muy caro. "La vida es muy dura para nosotros", se lamentaron. El Gobierno de Haití y la Misión de Estabilización de la ONU en el país (Minustah) destacaron en los últimos días las dificultades que representa dar albergue a cerca de un millón de personas que viven en las calles en Puerto Príncipe. Según cifras oficiales, el número de fallecidos en el terremoto es de 217.000 personas, entre cuerpos recuperados y enterrados. La cifra no toma en cuenta "miles de muertos" que se encuentran todavía bajo de los escombros. (EFE- Puerto Príncipe)