El tifón Kong-rey impactó Taiwán, convirtiéndose en la tormenta más grande que goleó la isla en casi tres décadas. Con vientos intensos y lluvias torrenciales, el fenómeno generó preocupación entre la población y las autoridades. Un empleado de la oficina administrativa local de Hualien declaró para AFP que seguían recibiendo informes de los residentes locales, pero que no podían llegar a ellos "debido al fuerte viento y la lluvia".
Las autoridades taiwanesas emitieron alertas y recomendaciones para la población, instando a los ciudadanos a permanecer en sus hogares y evitar desplazamientos innecesarios. La llegada de Kong-rey causó interrupciones en el transporte y llevó a la cancelación de vuelos y trenes en varias regiones.
El tifón, que se formó en el océano Pacífico, trajo consigo ráfagas de viento que superan los 200 kilómetros por hora, lo que provocó daños significativos en infraestructuras y dejó a miles de personas sin electricidad. La situación se complica aún más debido a deslizamientos de tierra en áreas montañosas.
Las imágenes de la devastación comienzan a circular en las redes sociales, mostrando árboles caídos, techos arrancados y calles inundadas. Las autoridades locales han movilizado equipos de emergencia para evaluar los daños y brindar asistencia a las comunidades afectadas. Se espera que la recuperación tome tiempo, dado el alcance de los daños.
Las autoridades taiwanesas emitieron alertas y recomendaciones para la población. Foto: AFP.
Ante la inminente llegada del tifón, se han establecido refugios temporales para aquellos que fueron evacuados de sus hogares. Las autoridades recomendaron a los residentes de áreas propensas a inundaciones que busquen refugio en lugares más seguros. La preparación y respuesta ante desastres se han intensificado, con equipos de rescate en alerta máxima.
El tifón Morakot, que golpeó Taiwán en agosto de 2009, es un ejemplo devastador de las consecuencias de estos fenómenos. A pesar de ser una tormenta de categoría 1, dejó un récord de 2.777 mm de lluvia en el sur de la isla, generando inundaciones y deslizamientos de tierra que cobraron 900 vidas.
Los meteorólogos continúan monitoreando la trayectoria de Kong-rey, que se espera que se desplace hacia el norte, afectando también a otras regiones del este de Asia. Las proyecciones indican que las lluvias continuarán durante los próximos días, lo que podría agravar la situación en las áreas afectadas.
e espera que la recuperación tome tiempo, dado el alcance de los daños. Foto: AFP.
Cabe indicar que, los tifones no solo representan una amenaza por la fuerza de sus vientos extremos, sino también por las cantidades masivas de humedad que transportan. Este exceso de agua puede provocar lluvias intensas, lo que aumenta el riesgo de inundaciones y deslizamientos de tierra, convirtiéndose en una de las principales amenazas para las poblaciones en su camino.
Ahora, el tifón Kong-rey se acerca a la parte oriental de Taiwán, donde se anticipan hasta 1.200 mm de lluvia entre el 29 de octubre y el 1 de noviembre, según la agencia meteorológica local, un pronóstico que alerta a la población ante posibles escenarios similares.