Elon Musk informó que el segundo paciente presenta una lesión de médula espinal similar a la del primer individuo en quien se implantó el dispositivo. Según Musk, los 400 electrodos del chip cerebral están funcionando correctamente, lo que indica un resultado favorable del implante.
"No quiero gafarlo, pero parece que ha ido muy bien con el segundo implante. Hay mucha señal, muchos electrodos. Está funcionando muy bien", afirmó Musk en un pódcast del informático estadounidense Lex Fridman.
Neuralink planea realizar otros ocho implantes cerebrales a lo largo de este año 2024. Foto: National Geographic
A pesar de este avance, Musk evitó proporcionar detalles específicos sobre la fecha de la intervención quirúrgica y el estado actual del paciente, reservando información clave sobre el procedimiento. No obstante, el empresario confirmó que Neuralink planea realizar otros ocho implantes cerebrales a lo largo de este año 2024.
El desarrollo de este proyecto es un hito significativo para Neuralink, una empresa que busca revolucionar el tratamiento de lesiones neurológicas mediante la tecnología. Los implantes cerebrales de la compañía están concebidos para restaurar funciones perdidas, como la movilidad y la comunicación, en personas con daños severos en el sistema nervioso. Aunque el éxito del segundo implante es prometedor, la comunidad científica sigue atenta a los resultados de estos ensayos, que podrían tener un impacto profundo en el futuro de la neurociencia y la medicina.
El chip cerebral de Elon Musk. Foto: National Geographic
El chip de Neuralink, conocido como "Link", es un dispositivo neurotecnológico diseñado para establecer una conexión directa entre el cerebro humano y una computadora, con el objetivo principal de restaurar funciones neurológicas perdidas. Además, la compañía busca ampliar las capacidades cognitivas y motoras de las personas.
Para comprender el funcionamiento de este chip cerebral, su implantación se puede resumir en varios pasos:
Implantación del chip: El "Link" es un dispositivo compacto que se implanta directamente en el cerebro mediante una cirugía mínimamente invasiva. Esta operación es realizada por un robot quirúrgico de alta precisión, desarrollado por Neuralink, que inserta electrodos ultrafinos en áreas específicas del cerebro sin dañar el tejido circundante.
Electrodos y lectura de señales neuronales: El chip contiene cientos de electrodos encargados de leer las señales eléctricas generadas por las neuronas. Estos electrodos captan las señales y las transmiten al chip, donde son procesadas.
Procesamiento y transmisión de datos: Una vez que el chip capta las señales neuronales, las procesa para convertirlas en datos que puedan ser interpretados por un ordenador o un dispositivo externo. El "Link" se comunica de forma inalámbrica con estos dispositivos externos.
Interacción bidireccional: El chip también puede enviar estímulos al cerebro, lo que significa que no solo interpreta y responde a las señales neuronales, sino que también puede estimular el cerebro para generar respuestas específicas.
Este desarrollo marca un avance significativo en la neurotecnología, con el potencial de transformar el tratamiento de las lesiones neurológicas y ampliar las capacidades humanas.