El cobre se destaca en el ámbito global como un metal valioso y esencial, por lo que cada genera una cantidad significativa de ingresos debido a su amplia gama de usos. Este metal es empleado tanto en la fabricación de monedas que se usan en operaciones diarias como en la producción de utensilios de cocina, que son esenciales para la preparación y el consumo de alimentos.
Uno de los más beneficiados por esta industria es Chile, el país de Sudamérica cuya producción, que supera los 5 millones de toneladas al año, es considerada como la más grande del mundo, de acuerdo con datos de la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco). Chile no solo excede a su vecino Perú, sino que también a grandes potencias, como Rusia y China. La exportación de dicho producto le generó, solo en 2022, US$50.000 millones.
Chile busca mejorar su producción de cobre para 2026. Foto: AFP
La extracción de cobre en Chile tiene sus orígenes en la época de la cultura prehispánica Tiahuanaco, extendiéndose sobre lo que hoy es el territorio chileno. No obstante, fue a partir del siglo XIX, tras la independencia, cuando la producción cobró un notable impulso, alcanzando una cifra cercana a las 19.000 toneladas de cobre extraído.
Tras pasar por una fuerte disminución en extracción del cobre, el boom de este metal inició en el siglo XX, cuando atrajo la atención de consorcios internacionales, que mostraron interés en zonas ricas de este elemento como Chuquicamata. Ya en 1966, se estableció que el Estado tendría el 51% de la propiedad de los yacimientos, por lo que podrían participar de su producción y comercialización.
Sin embargo, este escenario cambió en julio de 1971, tras aprobarse el proyecto de Nacionalización de la Gran Minería del Cobre. Esto permitió que el Estado reclame la totalidad de sus riquezas y recursos naturales de empresas extranjeras, con lo que nació la Corporación Nacional del Cobre de Chile, Codelco.
Desde ese momento, Chile se ha consolidado como un actor clave en el mercado global de cobre, acumulando el 28% de la producción mundial, gracias a la actividad de importantes compañías como Codelco, BHP, Anglo American y Antofagasta Minerals. Los ingresos generados por esta industria son críticos para la economía del país, representando el 15% del producto interior bruto (PIB) nacional.
El cobre es uno de los metales más empleados en todo el mundo. Foto: coats.com
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Chile goza de una gran cantidad de cobre en sus tierras, en especial en las regiones al norte como Antofagasta y Tarapacá. En ambas, se encuentran importantes yacimientos como Escondida, Chuquicamata o El Teniente.
A pesar de los buenos resultados obtenidos en los últimos años, en 2023 Chile presentó un leve retroceso en su producción. Por ello, el Gobierno del presidente Gabriel Boric anunció que se ha fijado una meta para dichos resultados, con la cual se busca aumentar 1,04 millones de toneladas para 2026.
Asimismo, se estableció aplicar el impuesto royalty minero, con el cual se busca aumentar la recaudación anual en un 0,45% del PIB (cerca de US$1.350 millones). “Fuimos capaces de generar acuerdos y soluciones innovadoras que dejaron satisfechos a todos los sectores involucrados”, precisó el ministro de Hacienda, Mario Marcel.
La extracción de plata es una importante industria en América Latina. Foto: Tecnología Minera
El cobre es un mineral que necesitamos para mantenernos saludables. El cuerpo utiliza el cobre para realizar muchas funciones importantes, como producir energía, tejido conectivo y vasos sanguíneos. El cobre también ayuda a mantener los sistemas nervioso e inmunológico y activa los genes.
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El cobre puede estar más cerca de nosotros de lo que pensamos, ya sea cobre puro o parte de una aleación. Aparece en monedas, utensilios de cocina, joyas, arte, decoraciones, muebles, cosméticos y pinturas, instrumentos musicales, ropa y más.
Cobre nativo. Foto: Jonathan Zander
En el ámbito del transporte, la presencia del cobre es muy importante. Este material se encuentra en automóviles, trenes, aviones, barcos e incluso naves espaciales. Se utiliza en motores, sistemas electrónicos y sistemas eléctricos.
La industria del cobre tiene un impacto significativo en la economía de Chile, siendo uno de los pilares fundamentales de su desarrollo económico. A continuación, se detallan algunos de los aspectos clave que reflejan la importancia de esta industria: