Tallulah Cox es una niña de tan solo 17 meses de edad que padece de un tumor cerebral. El tratamiento contra este cáncer podría dejarla infértil, por lo que sus padres han decidido congelar secciones de sus ovarios para que tenga el potencial de formar una familia si así lo desea en el futuro, convirtiéndose en la persona más joven en el Reino Unido en someterse al procedimiento.
Su madre, Zoe, de 36 años, y su padre, Richard, de 35, se sintieron conmocionados por la difícil situación que atraviesa su hija, la cual comenzó con lo que parecía ser un virus estomacal.
“Nos quedamos impactados cuando nos dijeron que tenía un tumor. Salvarla es nuestra prioridad, pero estamos increíblemente agradecidos de que también podamos velar por su fertilidad y la preservación de su ovario”, comentó Zoe.
“Tener la oportunidad de tener hijos en el futuro es increíble. A sus 17 meses no piensa en ser mamá, pero algún día quizá lo haga. Siempre quise ser mamá y quiero que ella también tenga esa oportunidad”, agregó.
Tallulah enfermó misteriosamente después de contraer varicela. Tras consultar con su médico de cabecera, este le dijo a la familia que podría tratarse de una gastroenteritis. Sin embargo, los síntomas no parecían disminuir con los medicamentos recetados, hasta que una resonancia magnética reveló el verdadero problema.
El proceso es totalmente seguro y le permitirá a la pequeña Tallulah decidir en un futuro si desea o no tener una familia. Foto: composición LR / Mirror
Zoe continúa: “Estábamos devastados. Nunca imaginamos que sería algo tan grave como un tumor cerebral. Lo único positivo fue que nos dijeron que era del tamaño de una uva, y normalmente cuando se descubren son del tamaño de una ciruela, por lo que se habíamos llegado temprano”.
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Por esto, y antes de que inicien los tratamientos en la menor, se le extirparán partes de los ovarios para congelarlas mediante un proceso de crioconservación, el cual permite que el tejido se pueda trasplantar hasta 30 años después de la intervención inicial.
“La quimioterapia puede dañar los ovarios, por lo que el tejido se congela. La idea es que en el futuro se pueda volver a colocar en el área pélvica para ver si puede producir óvulos”, dijo Tim Child, director médico de TFP Fertility y experto en congelación de ovarios.
Zoe concluyó: “Siempre está sonriendo y se lo toma todo con calma. Y el hecho de que todavía pueda tener la oportunidad de ser madre significa mucho para nosotros”.